Teniendo en cuenta la baja estima que tiene el español medio por los hombres de negocios, me imagino que la idea de uno de los españoles más exitosos afuera de España, Angel Cabrera, de hacer que en la escuela de negocios que dirige en Arizona, los alumnos pasen por una ceremonia de graduación que incluye una especie de juramento hipocrático para los negocios, sonará muy rara. Sin embargo, Thunderbird acaba de adoptar un Juramento de Honor que los graduados adoptan, en el cual se prometen bastantes cosas, entre ellas crear prosperidad sostenible alrededor del mundo. Por mi parte, creo que esto es una gran idea. Si es importante que los médicos se comprometan a no empeorar la salud de sus pacientes, sin duda creo muy relevante que los futuros hombres de negocios se comprometan a dejar el mundo mejor de como lo encontraron, algo que por diversas razones no viene sucediendo.
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Ricard Bou en octubre 27, 2007 ·
Creo que la ética es un pilar fundamental a nivel ejecutivo, directivo y presidencial en el mundo de los negocios, sobretodo porque a esos niveles no es tanta la gente que hay, y por las repercusiones de acciones poco éticas.
En muchos países el poder está en manos de 10 a 50 personas y me parecería fantástico que existiese un código ético escrito por el bien de las empresas y los países, por el bien de ellos mismos y de la gente en general.
Ahora ese código existe de forma tácita, y estigmatiza al que lo rompe si tal rotura se hace pública.
Me parecería genial que, además, el código ético aterrizase en todos los estratos a modo de Sarbannes-Oxley.
Relacionado con eso un día escribí este post en la ideoteca.
ana en octubre 27, 2007 ·
No se porqué me da la impresión que los hombres de negocios de España no son muy finos.
Ello contrasta con la cultura del pueblo español y las agradables personas que son su pareja reinante.
He criticado en otros blog el hecho de que JUAN CARLOS ,una persona tan encantadora sirva de embajador de estos hombres a quienes solo parece interesarles la rentabilidad.
Por ejemplo la vez pasada vino una señora vice presidenta a solicitar aumento de tarifas.A esta señora le sentaba más la exigencia de tipo crudamente económico(principal fuente de inflaciòn para un país como argentina donde las únicas inversiones son en servicios públicos consecionados y sin aporte de capital alguno).
Pero verlo a JUAN CARLOS hacer un reclamo así ,teniendo en cuenta la historia,me duele muchísimo
Galleguayo en octubre 28, 2007 ·
Shoki Hoko
Shoji Komei
Ritsugyo Boeki
Algo deberíamos aprender de los japoneses ¿No te parece?
El gran ejemplo lo tienes en los Tres diamantes, esa Escuela que todos deberíamos conocer, para poder aprender…
Unha aperta
alguien en octubre 28, 2007 ·
tranquilo gualeguayo, que todos en este blog entendemos japones….
jose en octubre 28, 2007 ·
Entreviste la pasada primavera a Angel Cabrera por telefono. Intentó poner en marcha un juramento similar en el Instituto de Empresa, pero no fue posible. Ahora Cabrera apoya a Naciones Unidas para crear una red internacional que difunda la ética y la responsabilidad social en todas las escuelas de negocios y universidadades del mundo dentro del Global Compact.
Gibran Armijo en octubre 29, 2007 ·
Leeré sobre lo hecho por Angel Cabrera y en que quedó lo del Instituto de Empresa, asi como proponerlo a mi ex-universidad, ya que parece una exelente inciativa, aunque «del dicho al hecho, hay un gran trecho» 😉 por que inclusive después de incorporar un juramento asi, aun queda mucho trabajo por delante para que exista una continuidad ,un seguimiento, un hilo conductor. Que no se quede en un formalismo, trámite o repetición mecánica. La idea me gusta, habría que complementarla con mas bases, materias y labor de conciencia durante la carrera, asi como incorporar algún mecanismo de seguimiento (ademas de los modelos de responsabilidad social tipo ISO). Saludos!
-GA
Juan Navidad en octubre 29, 2007 ·
Se puede ser ético y empresario a la vez. Lo que pasa es que muchos empresarios creen que esa idea es una contradicción por lo bien que les va saltándose a la torera todas las leyes y normas éticas -muchos ni tienen-.
Luego pasarán veinte o treinta años (¿días?), vendrá un gurú de esos que nos enseñarán algo tan obvio como eso, vendiendo libros y dando conferencias adornadas de revelación divina.
A mí me lo enseñó mi madre: que es una bobada competir si puedes aliarte con quienes dicen competir contigo. Mi propia ética me impide ganarme la vida diciendo lo que todo el mundo sabe -y no aplica-… Pero bueno.
Saludos cordiales,
Juan Navidad
Dinamización de ideas
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Ambrosio en octubre 27, 2007 ·
¿Qué entiendes tu por exitoso?