Al usar un ordenador portátil, se espera que todo sea gratis, y cuando se utiliza un smartphone lo que se espera es tener que pagar. Esa es la razón principal por la que el ecosistema del portátil se está muriendo y el de los smartphones está prosperando.

Los ordenadores portátiles han sido caros tradicionalmente. Desde hace un par de décadas nos hemos acostumbrado a pagar más de 800€ por cada uno, (el precio medio de un Mac es de 1.100€). Los smartphones sin embargo, son casi gratis. A pesar de que Google está empezando a tener cierto éxito en ventas con el Nexus 4, la mayoría se muestra reticente a pagar por un smartphone. Se espera que sean subvencionados o gratuitos. Pero lo que es sorprendente de verdad es cómo cambia el comportamiento de los usuarios una vez adquirido el gadget. Un consumidor espera que su teléfono móvil le salga gratis pero ¿qué sucede después para que esté dispuesto a pagar en exceso (por ejemplo, por mensajes de texto, minutos de voz, datos en el extranjero) aun cuando existen alternativas libres? Es un marco mental diferente, casi como un acuerdo entre empresas y consumidores: obtener algo gratis y pagar después frente a conseguir algo que es caro por adelantado y luego dejar de pagar. Un portátil es una gran inversión inicial que te permite a posteriori entrar en un mundo mayormente libre. Un smartphone es una pequeña inversión inicial para entrar en un mundo caro, pero muy aceptado. Un portátil es una experiencia ilimitada que va ligada a una conexión a Internet ilimitada. En el mundo de los portátiles prolifera la piratería porque la gente espera que todo sea gratis, pero esto ocurre en mucha menor medida en el mundo de los smartphones. Y es casi psicológico: la misma gente que descarga material pirata en ordenadores no lo hace normalmente en sus teléfonos, a pesar de que, por ejemplo, hay muchos clientes Torrent para Android. Un smartphone es una experiencia «a la carta» en la que se paga, y caro, por cada componente, incluidos los paquetes de datos. Como resultado, el ecosistema del smartphone está bien financiado y va prosperando mientras que el del ordenador está muriendo, haciendo que la experiencia de usuario en el portátil sea cada vez menos «divertida».

Desde 2011 se venden más smartphones que ordenadores. Esto se debe sobre todo a que los desarrolladores y productores de contenidos necesitan cobrar y están viendo que consiguen mucho más dinero con el desarrollo o la producción para iOS o Android  que con las de Windows o Mac.

Además, la experiencia de usuario “sólo para móviles” está en alza. Path, Foursquare, Uber, Instagram y Whatsapp son sólo algunos ejemplos de ello. Cuando empezaron a popularizarse los smartphones, la gente solía decir que experiencia “sólo en la web” sabía a poco. Ahora es todo lo contrario. Los que usan portátiles también tienen que tener a mano un smartphone y en el caso de los juegos es aún más radical. Los desarrolladores, al darse cuenta de que pocos querían pagar por juegos de ordenador pero muchos más estaban y están dispuestos a pagar por juegos para móviles o tablets, se pasaron a desarrollar para iOS y Android. Y así los juegos se hicieron de oro en los teléfonos.

Esta percepción se traslada al mundo de las inversiones. Por ejemplo Instagram es una aplicación gratuita y sin embargo, Facebook pagó casi mil millones por ella. No pagaron por el dinero que pensaban que harían de Instagram en sí, sino por lo que supuso para Facebook: Instagram es tan joven como lo es Facebook y Facebook era hasta hace poco una empresa para PC pero en Instagram encontró un atajo para el mundo móvil. En general los inversores son ahora mucho más propensos a invertir en una plataforma móvil que en una plataforma de PC, incluso si la plataforma móvil, como Instagram, no tiene forma de obtener beneficios económicos por sí misma. El crecimiento móvil tiene la misma capacidad de crecimiento que tuvo la web “premium” hace una década. Y es así incluso a pesar de que hasta ahora la publicidad, por ejemplo, es más fácil de monetizar en la web que en los móviles. Está claro: todo el mundo ve en el móvil el futuro.

Durante muchos años, cuando los teléfonos eran teléfonos y PCs eran PCs, hubo un duro debate sobre cómo los productores de contenidos y desarrolladores iban a ganar dinero. Y la respuesta, proporcionada por Steve Jobs, resultó ser que había que conseguir enganchar a la gente a un dispositivo que fuera un ordenador, pero en el que todo el mundo tuviera que pagar, y que llamarían teléfono. Siempre habría otra alternativa posible, en la que el software fuera de código abierto y el usuario pudiera generar contenido. Y eso todavía existe, sobre todo impulsado por Google, pero incluso Google tuvo que adoptar el contenido y el software de Apple para hacer prosperar Android.

Ahora, antes de terminar, he aquí una lista de las razones secundarias para explicar por qué los smartphones y las tablets están arrebatando la hegemonía que hasta ahora tenían los ordenadores (o por qué iOS y Android están destronando a Windows y OSX):

-Los smartphones se expandieron en forma de tablets y estos ahora compiten en tamaño de pantalla, una de las únicas ventajas que le quedan a los PCs.

-La gente se está acostumbrando por fin a los teclados de vidrio (algunas aplicaciones como SwiftKey los hace más sencillos), y por lo tanto pronto podremos decir adiós a los teclados clásicos.

-Los portátiles son más para productores de contenido y la mayoría de las personas son consumidores de contenido. Es por eso que el ambiente de trabajo sigue estando dominado por los PC y probablemente será así por mucho tiempo.

-Los smartphones son mucho más fáciles de llevar a todas partes y por eso, de utilidad para un gran conjunto de aplicaciones, como por ejemplo aplicaciones para hacer deporte.

-Los smartphones ofrecen conectividad a través de WiFi y a través de redes móviles mientras que los portátiles en su mayoría sólo ofrecen conectividad WiFi. El WiFi es común, pero no es tan generalizado como la conectividad móvil, por lo tanto un smartphone o una tablet tiene la mejor de las opciones: ambas.

-Una de las mayores ventajas de los ordenadores portátiles es el almacenamiento, pero el almacenamiento en la nube (cloud computing) es ya una alternativa.

-El hardware que se necesita para proporcionar una buena experiencia de usuario en el móvil da un uso más inteligente a la energía que el hardware que se necesita para proporcionar una buena experiencia de usuario en el ordenador portátil.

-Si bien los portátiles son bastante asequibles ahora, no son tan baratos como los buenos smartphones, que se dan de forma gratuita o casi a coste cero a través de contratos con las operadoras. Los ordenadores portátiles compiten duramente entre ellos en velocidad de procesador y memoria RAM, por lo que los baratos, sin buenos procesadores ni RAM, son simplemente malos productos.

Pero en general, me atengo a mi idea inicial: la principal razón por la que los smartphones están ganando la batalla al PC es porque hay más dinero en los smartphones y, aunque la información aspira a ser libre, cuesta dinero producirla. A riesgo de ganar muchos enemigos con mi afirmación, me gustaría cambiar el famoso «la información aspira a ser libre» a «la información aspira a ser asequible». Puedo estar de acuerdo con Aaron Swartz sobre que la ciencia que sólo se obtiene en las universidades caras es mala, pero la clave no es hacer las cosas gratis, es que sean asequibles. Que la información sea asequible, que el contenido sea asequible y que el software sea asequible. Y las plataformas móviles parecen haber logrado un buen equilibrio en esto, mejor que el conseguido por los ordenadores portátiles, y es por eso que están prosperando. Mejor formato, mejor modelo de negocio. Así de simple.

Durante décadas en tecnología sólo había dos lenguas: la de la manzana y la de la ventana. O eras de Windows o eras de Mac. Como en todo, siempre había otras lenguas minoritarias que luchaban por encontrar su sitio (Linux) pero el pastel se cortaba básicamente en esas dos porciones.

Ahora este bilingüismo ha cambiado. La batalla en estos días es móvil y los contrincantes son iOS y Android. Los típicos “Mac es mejor porque me deja hacer esto” o “Yo prefiero Windows porque es mejor para esto otro”  se han transformado en “¿Con tu iPhone puedes hacer esto?” y “¿Android te deja hacer esto otro?”

Como CEO de Fon quiero ser neutral, tenemos ahora la red WiFi más grande del mundo y nos hemos beneficiado enormemente de estos dos sistemas operativos.  Es parte de mi trabajo conocer a fondo ambos sistemas por lo que mis bolsillos están llenos siempre: en un lado llevo un iPhone y en el otro un Android.  La Blackberry la abandoné cuando finalmente aprendí a escribir en teclados/pantalla. A este punto lo único realmente bueno de la Blackberry es que es el dispositivo más económico si viajas mucho, el del roaming celular más barato. En los otros o usas WiFi o te matan con el roaming.

Android por su parte, me gusta mucho por los teclados Swiftkey, que te dejan escribir en muchos idiomas y te detecta el que estás usando y que en iOS no están permitidos. iOS tiene un globito para cambiar idiomas que consideo torpe y no se da cuenta en qué idioma estás escribiendo. Solo SwiftKey es una de las principales razones por las que prefiero Android.  También los administradores de conexión WiFI como el de Fon, que permiten autoconectarse a redes WiFi y que en el iPhone tampoco pueden instalarse. Es terrible como los productos Apple no recuerdan redes WiFi via cookies como la de Fon y tienes que meter una y otra vez la contraseña.  Además Android es más “libre” y tiene más aplicaciones gratis.

Pero iOS es mejor para la fotografía. Snapseed es mi app preferida para fotografía pero hay muchas.  El hardware y el software en cada versión del iPhone mejora con creces. El video también es otro punto fuerte del iOS, la variedad de juegos es claramente superior a Android. La pantalla retina es una pasada. Apple siguió con una buena regla que tenía con la Mac y es hacer pocos modelos y lograr que sean geniales.  Pero ahora Samsung les copió con el SIII y le ha ido bastante bien.  Ahora mismo uso un iPhone 5 y un SIII y son los dos brillantes. En términos de tamaño me quedo con el SIII, me parece muy finito el iPhone 5, hay que tener dedos bastante chicos para escribir con esa anchura de pantalla.

La batalla Windows vs. Mac la ganó Mac en mi opinión de usuario, pero esta sigue todavía abierta en el mercado donde gana Microsoft. Para mi pasarse de Windows a Mac es 2 semanas de dolor y una vida de gloria.  Pero curiosamente aunque Apple perdió contra Apple en el formato PC, creo que al final Apple ganará pero no tratando de pelear en las laptops, netbooks y desktops, terreno hostil para el gigante de Cupertino, sino con iPads, iPad Minis y con la ayuda de Android que hace que todos se pasen a las tabletas.  Microsoft como empresa la veo en una decadencia inexorable.

Sé que en este mundo uno no consigue ser popular si elogia a Bill Gates y critica a Steve Jobs. Pero pese a que uso Apple y he dejado Microsoft de lado si hay una cosa que Bill Gates hizo bien y Steve Jobs hizo mal, y es la colaboración con terceros. Es por esto que un producto mediocre como Windows terminó conquistando mucho más a los usuarios del planeta que un gran producto como Apple. Microsoft trata su software para que sus productos estén en la mayor cantidad de hardware posible, Apple quiere controlar todo y dominar cada sector en el que está con su software y hardware. Por ahora lo consiguieron solo en el mundo de los reproductores musicales, pero si pudieran lo harían con los teléfonos y los ordenadores. La diferencia entre Apple y Microsoft no es que una empresa es abierta y la otra monopolista. Las dos tratan de ser monopolistas y por ahora lo consiguió más Microsoft y por eso es un standard.

Pero no solo son así Microsoft y Apple como empresas sino que Bill Gates y Steve Jobs tienen personalidades que reflejan las empresas que fundaron. El año pasado fue peculiar, porque en diferentes momentos conocí a los dos, Bill Gates y Steve Jobs. Antes de estar con estos dos famosos personajes creía que Bill Gates era un monopolista arrogante y que Steve Jobs era una persona muy abierta y de fácil trato, pero al pasar tiempo con ellos mi opinión fue muy diferente. Steve Jobs me pareció una persona de trato difícil más interesada en decirte lo que piensa que escucharte, genial pero muy enfocada en lo suyo y desconfiado de los demás. Bill Gates en cambio es una persona de una enorme curiosidad y comparado con Steve Jobs diría que hasta humilde. Sé que cuesta creer lo que digo y sigo insistiendo que uso productos Apple y hasta soy accionista de Apple, pero creo que si Apple, ahora que le va tan bien, colaborara un poco más, le iría aún mejor.