En este blog me han criticado muchas veces por haber tenido éxito. La mayoría de la gente sabe que crecí en el entorno de una familila de clase media, hijo de profesores, y que me gané mi dinero creando 7 empresas, de las cuales una me salió francamente mal, algunas mas o menos y otras muy bien. También saben que empecé mi primera empresa escribiendo un plan de negocios, saliendo a buscar inversores, reclutando un buen equipo gestor y ejecuntando una estrategia. Así que no hay muchos secretos sobre cómo gané mi dinero.

Pero no pasa día en el que no me pongan a parir por ser rico (me critiquen) en mi blog. Si es con humor, lo dejo. Si es directamente un insulto, no lo publico. Pero lo que yo me pregunto a este punto es si lo que esta gente que me critica quiere es una sociedad sin ricos o una sociedad sin pobres.

Para mi, la respuesta es clara. Lo que tenemos que querer es una sociedad sin pobres o, como dice mi amigo Maximiliano Fernandez, de Argentina, lo que un país tiene que aspirar es a tener los pobres más ricos del mundo. ¿Por qué? Porque si los pobres de Suiza, digamos, son los más ricos del mundo, que puede que lo sean, los demás suizos estarán aún mucho mejor. Y Suiza es un buen ejemplo porque tiene los pobres más ricos del mundo, pero tiene algunos de los ricos más ricos del mundo. Lo mismo le pasa a Suecia, otro país donde los pobres viven muy bien, pero hay fortunas, como las del fundador de Ikea, que casi no tienen rivales en el mundo.

Pero los lectores me preguntarán «¿qué pasa con países como Nigeria, en el que casi todos viven en la miseria, pero algunos son billonarios?». Mi respuesta es que mi alegato en defensa de los ricos no es válido en países que viven de la explotación de los recursos naturales. En esos casos, si es común que unos pocos se hagan con todo y el argumento de agunos de mis lectores que muchos son pobres porque algunos son ricos es válido. Pero en sociedades de la información, como es hoy la UE, USA y Japón, que viven principalmentes de la acumulación de conocimientos, ahí si se dá la fórmula que para que haya menos pobres tiene que haber muchos líderes empresariales compitiendo por los recursos humanos haciendo subir los salarios, y estos líderes empresariales o emprendedores son generalmente ricos. Es más, no conozco ninguna sociedad exitosa, es decir ningun país cuyos pobres están entre los más ricos del planeta, que no tenga también gente muy rica.

Mi conclusión es que cuando un país realmente maltrata a sus emprendedores se empobrece. Esto no quita que no haya que cobrar impuestos progresivos, que me parece muy bien, y que haya que crear un ambiente por el cual la gente que cae en situaciones adversas reciba la ayuda que se merece para salir adelante y que las desigualdades se reduzcan. Pero la solución no es que haya menos ricos, sino que haya menos pobres. Y si en España los sueldos son tan bajos es porque no hay suficientes emprendedores creativos y capaces de competir a nivel global, como los hay en países como Holanda, Alemania, el Reino Unido.

Otro tema que le juega en contra a España es que muchas de las grandes fortunas españolas vienen de industrias como la construcción y el turismo, que emplean una mano de obra menos calificada y menos remunerada. En estos momentos de crisis creo que España tiene que aprender de Irlanda, que pasó de ser uno de los países más pobres per cápita de la Unión Europea a uno de los más ricos atrayendo al capital norteamericano a instalarse en Irlanda. Pocos saben, por ejemplo, que Google tiene su capital global en Irlanda.

¿Conclusión? Mejor que odiar a los ricos y a las empresas ricas, es invitarlas a que vengan a tu país, como hizo Irlanda.