Siendo un argentino inmigrante en España y habiendo estado aquí 10 años, aún no me acostumbro al tema de los nacionalismos en este país. Aunque los países latinoamericanos son muy jóvenes y fueron construidos en base a una inmigración de nacionalidades diferentes, las tensiones nacionalistas casi no existen. Se ve que hacen falta más años de historia para que estos sentimientos surjan. Construyendo Jazztel, Ya.com y ahora FON me he encontrado con el tema de los nacionalismos a veces de maneras no tan gratas. Por ejemplo, cuando blogueé la idea de FON (que no se enojen en la academia con lo de bloguear pf), no teníamos ni sitio. Luego de pocos días y gracias a donaciones de diseños foneros, teníamos el sitio en español y en inglés. Al poco rato, vino el buen rollo (buena onda) de foneros que se ofrecieron traducir el sitio de FON a otros idiomas que se hablan en España. Primero llegó el Euskera y nosotros aceptamos encantados. Pero luego, lamentablemente, vino el mal rollo de gente que al no ver su idioma aún en nuestro sitio nos acusaba -y a mi personalmente-, de favorecer, por ejemplo, a los vascos en contra de los catalanes. Como estos mensajes eran tan agresivos, decidí no publicarlos. Uno de ellos venía de un catalán, estaba escrito en catalán, y en él la persona me acusaba de favorecer a los vascos sobre los catalanes por tener FON primero en Euskera.

Lo más curioso es que -asumiendo que iba a publicar su mensaje y que yo no entendía catalán (que lo entiendo)- le pedía a otros lectores catalanes de mi blog que me tradujeran su mensaje. Esto me pareció inentendible. Esta persona, que no se ofrecía a traducir el sitio de FON en catalán, pretendía que otro le tradujera su mensaje en contra nuestra al español para que yo lo entendiera. Por suerte, apareció rápidamente otro catalán con muy buen rollo y ahora tenemos el sitio tanto en vasco como en catalán.

Mi conclusión es que veo en España un nacionalismo con buen rollo, el del que ama su cultura y quiere propagarla y nos da la traducción, y el del mal rollo, el que se siente discriminado, ofendido, enojado, porque vio el euskera antes que el catalán. El último pedido de hoy vino insistiendo que lo pusiéramos en bable en un tono parecido. ¿Mi respuesta? La de siempre: amigo fonero, perdona que no hable bable, pero si tu quieres a tu idioma ayuda a que lo tengamos en FON y danos la traducción.

Por cierto, el otro idioma muy hablado ahora en España es el árabe. Ya hay más de 700 mil personas que hablan árabe en la península. Aún no tenemos ningún fonero que haya traducido FON al árabe. Si eres un fonero que lo habla, danos los textos en tu idioma que contentos los colgaremos de nuestro sitio.

A veces me pregunto si los vascos o catalanes nacionalistas se dan cuenta de que, debido a la bajísima tasa de natalidad que tiene la población nativa en sus comunidades (1,2 cuando hace falta 2,2 para matener la población), en los próximos 50 años el desafío para preservar su cultura no será tanto el tema de luchar contra «Madrid» sino la integración de los inmigrantes, que tendrán alrededor del 50% de los hijos y poco interés en mantener culturas minoritarias.

Este es un tema parecido al de los judíos de la diáspora. Más del 50% de los judíos de la diáspora (que no están en Israel) se casan con no judíos, y como es casi imposible convertirse al judaísmo, la religión va desapareciendo poco a poco.