2007 4
Botellon 2.0
Publicado por MartinVarsavsky.net en General con Sin Comentarios
Cuando escribí el artículo sobre «aprender a beber» un comentarista muy joven de mi blog dijo que el participaba en los condenados «botellones» en España simplemente porque no tenía suficiente dinero como para pagar 10 euros la copa en una discoteca. Hoy en Palma de Mallorca decidí investigar este tema y me di cuenta que efectivamente el tema es así. Enfrente de la famosa discoteca Tito´s, en el Paseo Marítimo al borde del mar hay por las noches un enorme botellón con más de 1000 personas. Estuve observando la organización del tema y me pareció mucho más interesante y creativo de lo que pensaba cuando leía en la prensa sobre los botellones. Los botellones son como bares construidos por su público. Para que exista un botellón la gente se lleva sus gaseosas y bebidas alcoholicas para compartir con sus amigos. Por un lado está el componente negativo, el de emborracharse, pero vi otros positivos, la gente se divierte en una noche de verano, no es un tema comercial, nadie cobra por ir a un botellón y si uno piensa que su otra oportunidad era aburrirse en casa creo que la alternativa del botellón es mejor. Además me gustó el tema de «un bar generado por sus usuarios» algo muy 2.0. Personalmente el tema de la bebida nunca me atrajo mucho pero si la gente se emborracha igual en las discotecas y lamentablemente sale a conducir, el tema negativo de la bebida se da adentro y afuera. Ahora lo que sentí que le faltaba a este botellón era música pero más allá de eso la gente que no puede pagarse la entrada a Tito también tiene derecho a divertirse. Creo que las ciudades en vez de luchar contra los botellones lo que tendrían que hacer es declarar que en ciertas zonas se pueden hacer botellones y tener cubos de basura y lo que haga falta para que el sitio no se transforme en un desastre sanitario. Pero entiendo que a los vecinos les parezca terrible tener a gente haciendo ruido afuera de su casa a las 3 de la mañana y de ahí la polémica de que todo esto ocurra en la calle y no en una discoteca o un bar.
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Sin Comentarios
mastropiero en agosto 4, 2007 ·
Magnifica la descripción de un botellón como un Bar 2.0
Tengo 24 años y sigo participando en botellones de vez en cuando en mi ciudad (Cáceres, Extremadura). No lo hago solo por dinero (que también), sino porque las posibilidades de compartir y relacionarse que da un botellón no te la da un bar, la libertad de movimiento, de hablar, de compartir experiencias, de cruzarte con gente que hace tiempo que no ves no te la da ningún bar.
En Extremadura hace ya varios años se abrío un debate interesante con todos los implicados: jóvenes, vecinos, hosteleros, padres… que dió como resultado la denominada Ley de Convivencia y Ocio. En esta ley se establece que cada ayuntamiento destinará y acondicionará una zona en su ciudad para que la gente pueda hacer botellón, estas zonas tienen que cumplir unos requisitos: distancia a viviendas y monumentos, servicios, transportes, seguridad, etc.. a la vez que se llevan a cabo medidas para la concienciación sobre el consumo abusivo de alcohol, la conducción, etc..
En la realidad la ley no se cumple al cien por cien por parte de los ayuntamientos, pero al menos no hay problemas de convivencia vecinos/jóvenes/hosteleros y todos tienen derecho a vivir y beber tranquilos.
Un saludo
Fernando López de Ayala en agosto 4, 2007 ·
Evidentemente usted como «nuevo» español adinerado no sufre las consecuencias del botellón, pero a los españoles «de toda la vida» pertenecientes a clases socio-económicas menos privilegiadas, que han estado cotizando durante décadas a la Seguridad Social y no disponen de carísmos seguros sanitarios privados, no creo que les haga mucha gracia acudir a las urgencias hospitalarias un viernes o sábado por la noche y encontrar que están colapsadas por niñatos embriagados.
Y ésto sin tener en cuenta la futura carga económica que supondrá para el generoso sistema sanitario público el tratamiento de una generación de cirróticos y enfermos crónicos de diversas patologías producidas por el uso abusivo del alcohol.
Por otra parte, vivir en La Moraleja, no es lo mismo que vivir en la Plaza del Dos de Mayo, o en cualquier otro punto de reunión de botellón. Tener que soportar el ruido de jovenes deshinibidos puede resultar intrigante y divertido la primera vez que se escucha, pero cuando ésto se convierte en algo habitual, ¿no cree que puede resultar «ligeramente» molesto?
Pero claro, sólo he comentado el ruído… ¿No será más desagradable el olor provocado por la micción?, ¿o el peligro de llegar o salir de casa y cortarse un pie con uno de los cristales seccionados y abandonados en alguna de la guerras campales provocadas por grupos violentos enardecidos por la ingesta de bebidas alcoholicas?
Además me sorprende que usted como empresario enalteza la práctica del botellón, el cual merma notablemente los beneficios de sus colegas hosteleros… Pero claro supongo que «hacer botellón» es similar a «hacer FON»… Bebemos «con tarifa plana» en casa y hacemos «roaming a bajo coste» cuando salimos «de marcha» con los amigos…
Gonzalo en agosto 4, 2007 ·
Martin podemos decir que es como aquellos asaltos de los 80 o un club del trueque pero de alcohol?
creo que la gente siempre busca alternativas para ahorrarse unos mangos clasica situacion es la de juntarse con amigos en la casa de alguno previo a salir para ya estar entonado y gastar menos en el boliche.
Abrazo
salvasi en agosto 4, 2007 ·
Varsavsky, no se si llegaste a participar del botellón de Mallorca 😉 o el de cualquier otra ciudad de España, te hubieras dado cuenta que los que participan, hablan y se comunican entre los miembros de la peña (colla, grupo, etc.) y extra-peña en momentos más puntuales, como por ejemplo para pedir un vaso, hielo o intercambiar alguna botella.
El tema es que la falta de música realmente no se llega a notar, el personal está metido en su rollo con sus colegas y tampoco necesita mucho más.
Comunicación y colegeo que me parece de alto valor social (tema aparte lo de emborracharse)
Por cierto, algunos ayuntamientos como el de Plasencia (Cáceres) tiene habilitadas zonas exclusivas para botellón.
Y es en la provincia de Cáceres, en su capital concretamente, donde nació este fenómeno social (1)
Saludos.
1 Del libro ‘Botellón, un conflicto posmoderno: «No hay muchos datos que avalen dicha pretensión. Pero hemos encontrado que el 26 de febrero de 1995, en su página 10, el diario EL PAÍS dedica un reportaje a ‘La horade recogerse’, y en el mismo habla de un curioso fenómeno denominado botellón, que se celebra en Cáceres y que promueven los mismos que alentaron en 1991 las revueltas nocturnas juveniles.«
rednoise en agosto 4, 2007 ·
Totalmente de acuerdo. Las ciudades tendrian que habilitar zonas para esto. En mi pueblo por ejemplo hay un pequeño jardin en el que se nos permite hacer botellon porque hay pocos vecinos y asi las autoridades lo tienen controlado y esto lleva funcionando asi muchos años y en otros lugares han hecho lo mismo.
Las personas que estan a favor de prohibir el botellon simplemente estan a favor de domir y tener la puerta de casa limpia, no se pronuncian acerca de la salud de los jovenes, ni les importa lo mas minimo.
Alfonso en agosto 4, 2007 ·
Aunque el tema es interesante aún no han llegado comentarios, mmm. Será porque todo el mundo a estado ayer de botellón 2.0. 😉
miguel en agosto 4, 2007 ·
Buena reflexión, pero algún punto y aparte no hubiese venido mal 🙂
JAVIER SANDOVAL en agosto 4, 2007 ·
Martín, eres un anarquista porque no crees en un mundo anárquico.Además de la música , que a veces también llevan o escuchan desde sus coches, al botellón le falta el marco físico como señalas.Ahí existe un mar de posibilidades como canta Patty Smith, pero las riendas de los caballos que nos arrastran en este mundo están en manos de gente cansada y aburrida.Invéntate algo contra el miedo.
Ilde en agosto 4, 2007 ·
En algunas ciudad de España ya se «llevan» los botellones a otros sitios, generalmente a sitios descampados donde la gente pueda divertirse sin molestar a nadie… por lo menos en mi ciudad se hace eso.
En mi ciudad los botellones se realizaban en la plaza principal, per los vecinos se quejaron varias veces, y decidieron llevarselos a otra zona un poco alejada de la ciudad. Algunas veces, he visto autobuses que van hacia esa zona, pero desconozco si se hará todos los fines de semana.
Un saludo
PoZu en agosto 4, 2007 ·
El hacer zonas acondicionadas para botellon, eso conlleva a que se pueda hacer fuera de una zona de vecinos, con lo que no molesta.
El problema será el de los empresarios. El ayuntamiento creo zonas para que los jóvenes no vayan a los locales…
Estamos de acuerdo que un chaval que no pueda permitirse 10€ por un cubata no irá igualmente a un local, así que este chaval no lo perderían.
Pero si que mucha gente, si le habilitan una zona, le ponen música y el cubata se lo hacen ellos, o incluso se ofrece el amigo (muy 2.0) prefiere ir a este sitio. Yo el primero.
Aquí en Lloret, la solución del Ayuntamiento es: Regamos la playa, y así la gente no hace botellones ni minifiestas en la arena. Que se emborrachen en la discos, total por 15€ tienes 3 cubatas mas camiseta…
Alejandroperez en agosto 4, 2007 ·
Martin en Sevilla años anteriores el Ayuntamiento organiza recintos donde los jóvenes pueden beber sin problemas y con todos o casi todos los medios para que esto se haga sin molestar a los vecinos y minimizando los riegos ( controles a la salida del recinto a los coches, etc ). Ayuntamientos como el de Sevilla tienen que seguir con iniciativas de este tipo y permitir de forma organizada y poco restrictiva que los jóvenes nos organicemos. En Valencia se complica mucho mas, ya que beber en la vía pública se considera delito y multa, así que vivimos el caso contrario, una restricción mas importante que en Sevilla.
Alejandroperez
XL en agosto 4, 2007 ·
Lo malo del botellón, es que permite el acceso a las bebidas alcoholicas a los menores de 16 años. Asi mismo el factor precio ejerce una función disuasoria, que evita que los adolescentes agarren una melopea de coma etílico.
Pregunta en un hospital cuantos ingresan consecuencia de botellón y cuantos vienen de bares…
Aparte organizar el botellón es muy 2.0 pero recoger y limpiar lo que ensuciaron no es nada 2.0, por que no lo hace nadie.
Por otro lado los ayuntamientos podrían tratar de hacer competencia desleal y habilitar zonas para botellones y cobrar 5 o 6 euros de entrada.
Con ello conseguirían reubicarlos en zonas que no molestasen a los vecinos, además con el dinero recaudado se podría limpiar la zona por la madrugada, podría haber control de edades, y un par de ambulancias con ATS, e indicaciones sobre como beber con responsabilidad (que cosas no mezclar, no en ayuno, anuncios de tráfico sobre accidentes…)
Esto solucionaría el problema pero nadie tendría valor de hacerlo, por que esta gente no vota, y sus padres si, y a lo mejor no les gusta la idea y no les votan, así que lo mejor es no hacer nada y no asumir ninguna responsabilidad.
Lo triste es que si los padres fuesen coherentes creo que estarían más tranquilos sabiendo que sus hijos están en zonas controladas con policia, asistencia médica…
Andrés Milleiro en agosto 4, 2007 ·
Al fin alguien que nos entiende medianamente a los jóvenes…y lo digo yo, un blogger de 19 años que claro que ha hecho botellón, más de una y de dos veces…
Un saludo Martín
davidp en agosto 4, 2007 ·
Efectivamente, el botellón es mucho más que simplemente emborracharse. De hecho, creo que el principal problema que tienen las autoridades a la hora de afrontar «este problema» es que lo ven como «un problema de alcoholismo». Y no se trata de eso. Y sinceramente, creo que aunque las copas costaran 3 euros en lugar de 10, seguiría habiendo botellones.
Por supuesto, el precio de las copas influye bastante, pero como decía antes, el botellón es mucho más que beber por beber. El botellón es quedar con tus amigos al aire libre, compartir las bebidas (que mucha gente bebe simplemente refrescos, sin alcohol), charlar, estás un rato con un grupo, otro rato con otro grupo… te vas encontrando entre tanta gente a muchísimos amigos que hace tiempo que no veías… etc, etc
Yo creo que es una diversión sana (salvando el tema de los excesos con el alcohol). Pero también entiendo a los vecinos que no pueden dormir con el bullicio de miles de personas. Por eso creo que están muy bien esas iniciativas que hay últimamente en algunas ciudades de reservar alguna zona como «botellódromo», donde la gente pueda hacer el botellón tranquilamente y sin molestar a los vecinos.
diego en agosto 4, 2007 ·
Hoy es un día de esos en que te pesa la cabeza, el cuerpo, y todo lo que suena a tu alrededor te produce un enorme dolor de cabeza. Se llama día de resaca.
Realmente no es porque ayer estuviera de botellón(que si hubiera sido así no me hubiera gastado los más de 120€ que me gasté). Estuve de fiesta junto al mar en la costa gipuzkoana.
Recuerdo aquellos años en que sí haciamos botellón. Eran las mejores noches, no solo por lo económico, sino porque en un bar no puedes hablar, no puedes compartir tus filosofias ni pensamientos. Sin embargo, el botellón es un acto social en el que te relacionas, no solo con tus amigos, sino que también conoces a los que están cerca de tí haciendo botellón. Al final se convierte en una gran familia con la que disfrutas de una maravillosa noche.
Nuestros botellones solían ir acompañados de música, y en su defecto, entonabamos maravillosos cantos populares.
La desventaja del botellón? como bien decías, el ruido y molestias que genera a los vecinos. Pero si lo haces como lo hacíamos nosotros en zonas que no molestabas a nadie, ¿por qué está prohibido el botellón?
Pedro Blanco en agosto 4, 2007 ·
Yo creo varios problemas a los botellones organizados. Primero, los sitios que se escojen, conocidos como Botellodromos, suelen estar alejados de la ciudad, por lo que el desplazamiento se realiza o andando, taxi y coche. El principal peligro es que hoy en día mucha gente conduce y bebe. Segundo, hoy en día en todas las ciudades hay diferentes razas sociales, pijos, kanis(malotes), heavys, raperos…Los pijos no quieren ir donde haya kanis y los kanis van donde están los pijos.
Yo vivo en Sevilla y la verdad que todavía no he ido al botellodromo de la Cartuja, es más creo que no esta ni construido(pese a que los politicos dijeron que lo iban a hacer).
La gente quiere beber, mientras que se hace botellón, se dialóga con mucha gente y uno se rie un montón. Después se va a la discotéca y uno se pone a bailar o a ligar mientras que se toma la consumición de la entrada.
Alejandroperez en agosto 4, 2007 ·
No permitir beber alcohol a ciertas edades se podría comparar con no poder ser blogger antes de 16 años porque se supone que no tiene el criterio suficiente. Gran error, creo que tienes que ir acompasado de la madurez, no de la edad, en todo lo que hagas en la vida. La madurez es un nivel para todos los aspectos de la vida, para beber, para trabajar… para todo.
Alejandroperez
Patricia Campbell en agosto 4, 2007 ·
Martín, esto entre vos y yo, ese tal Fernando López de Ayala es inbancable!!! seguro que es del Opus…
Buen fin de semana
Patricia
JA en agosto 4, 2007 ·
Lo del botellón es mejor ya que se hace y se va seguir haciendo, pues facilitarlo para que esté «con infraestructura ´til».
-Lejos de núcleos urbanos
-Con servícios de transporte (Autobus, Taxis, etc)
-Con W.C públicos (Casetas de Obra podría valer).
-con cierta vigilancia (Pero esta vigilancia, para prevenir altercados) de los contrario no serñia válida, vamos que no me imagino botellón co la Policia nacional pidiendo DNI. Su misión evitar peleas nada más.
-Con todo lo anterior y bajo la premisa de respetar ciertas reglas como no ensuciar por ejemplo (trabajo educador) ya que se les habilita el sitio con diferentes servícios, y ciertas conductas, como NO conducir bebidos, ciudar del sitio y respetar a los demás, el resto que tengan LIBERTAD, de lo contrario NO funcionará.
Salutes.
Jazztel_Bolsa en agosto 4, 2007 ·
Para el comentario 14, de Andrés Milleiro, yo también tengo 19 años y NO me incluyas en el grupo de «los jóvenes» según el concepto que tengas sobre «los jóvenes».
Yo, cuando más disfruto con mis amigos es estando en la Universidad. De lunes a viernes. Los fines de semana los dedico a estar con la familia y a mi vida e iniciativas personales (por ejemplo, desde mayo, contactar con Jazztel para proponerles cosas en cuanto a promociones, servicios, atención al cliente, etc. Soy accionista, me juego mi dinero y además, Jazztel me sigue pareciendo el proyecto más ilusionante de entre las empresas cotizadas en España).
Así soy con 19 años.
Yo me divierto con mis amigos estando en la Universidad. Sin embargo, si salgo con ellos en las noches no aguanto ni una hora. No disfruto y además siento que pierdo tiempo.
¿Mi «estrategia» de vida a los 19 años?
De cada 100 euros que ingrese, 50 van para la Bolsa, 40 para ahorro y 10 para gastos (revistas Capital, Emprendedores, libros…). A veces debo coger parte del dinero del ahorro para gastos extraordinarios (=»imprevistos»). Si dentro de mis perspectivas no está la de realizar gastos importantes, el dinero del ahorro se destina a Bolsa. Ganaré o perderé dinero, pero no dejaré que mi dinero pierda valor cada año (dentro de la zona euro) así por así.
En los últimos 3 años, estoy muy seguro de que no he bebido alcohol en más de 4 ocasiones. Y no es porque no quiera llenar las arcas del Estado (si por mi fuese, ya podrían elevar los impuestos sobre el alcohol un 50% o más).
(«Off/On-topic»: luego en la prensa y demás medios normal que siempre se diga que cada vez hay mayor desigualdad social. ¡¡¡ Cómo no va a haberla !!! Las desigualdades no tienen nada que ver con los sistemas económicos. Las desigualdades las crea uno mismo dentro del sistema que sea.)
Así es mi vida 2.0
Saludos,
Jazztel_Bolsa
P.D.: Ante los borrachos, tolerancia 0. Incluso aunque sea tu mejor amigo. Hay que enfadarse delante de él e intentar redirigirlo al buen camino (también 2.0).
P.D.: A los 19 años deberíamos divertirnos jugando, haciendo deporte, que es más divertido, sano, enriquecedor y 2.0. Pero los Ayuntamientos nos quitan los campos (de fútbol y baloncesto) públicos por la creciente edificación de viviendas. ¡¡¡ Ayuntamientos 2.0 y «jóvenes» (con dos dedos de frente) YA !!!
davidp en agosto 5, 2007 ·
para #21 (Jazztel_bolsa):
Crecerás y te darás cuenta de que no todo en esta vida es el dinero. Que el éxito no se mide solamente en euros.
Con 19 años y dedicando toda toda tu vida y esfuerzos a ganar dinero… pueden pasar dos cosas:
1- que consigas mucho dinero. Pero con el plan que llevas no tendrás ni un sólo amigo. (aunque creo que me dirás «¿y qué si no tengo amigos? – he triunfado». Yo no creo que eso sea un triunfo)
2- que no te funcionen los negocios y no consigas dinero… y con el plan que llevas tampoco tendrás ni un sólo amigo (y ahora te costará un poco más de trabajo decirme que «¿y qué si no tengo amigos?»)
Martín, por favor, parece que este muchacho te admira. ¿Podías hablarle sobre este tema? Parece que tanto post sobre éxito empresarial lo tiene un poco cegado!!!
andi en agosto 5, 2007 ·
como en Punta del Este en la Barra supongo, entre la Ancap y Medialunas. El principal problema es que bloquean el tráfico, porque por lo general se portan muy bien, por lo menos comparando con como se comportarían chicos de la misma edad del norte de Europa.
No sé, pero no creo que lo hagan solo porque no tienen plata, la mayoría le puede pedir a los padres.
xavi en agosto 6, 2007 ·
En el barrio de gracia de Barcelona apetece mucho tomar un par de cervecitas por la tarde/noche. Encantado pagaria los 2 euros y pico que me piden por tomar cada una en la terraza de un Bar. Pero la demanda supera con creces la oferta y encontrar un hueco en una terraza es practicamente impossible. Aún así, el temor a que los urbanos me multen con 30 Euros por tomarme el par de cervecitas fresquitas del super con los colegas sentados en un banco, aumenta mis posibilidades de morir por deshidratación ante una ola cualquiera de calor.
Jazztel_Bolsa en agosto 6, 2007 ·
davidp,
Creceré y me daré cuenta que el mundo empresarial no es tan maravilloso desde el primer momento (con la burocracia y personas quijotescas que hay todavía en España…). Creceré y me seguiré diciendo a mi propia cabeza que a salir por ahí y al beber no le cojo ningún sentido (sería preferible restaurar antiguos campos de fútbol-baloncesto que había en algunos pueblos, en los que hoy no hay más que viviendas). Para pasarlo bien también están las boleras, me encanta jugar a los bolos, pero como proposición a los amigos nunca funcionaría.
Si en algún caso hay que beber, con moderación y con responsabilidad es en actos de cierta relevancia para la persona y no todos los jueves, viernes ó sabados con personas que ves o puedas ver todos los días.
Por otra parte, a mi me encanta participar en los foros que hay en internet, pues se aprenden muchas cosas. En blogs apenas participo (básicamente participo en éste).
En cuanto al dinero. No espero hacerme ni rico ni pobre. Ese no es mi objetivo de vida. Mi objetivo de vida es disfrutar con lo que trabaje o emprenda. Si gano dinero podré afrontar proyectos más interesantes o importantes. Y si me hago pobre, ya me levantaré, que para algo existe el trabajo y las tierras (por si acaso). De hecho, el inicio de mi etapa como inversor comenzó a finales del año 2000, junto con el pinchazo del boom tecnológico. Así, la Bolsa bajó fuertemente hasta el año 2003 (Jazztel más tiempo todavía). Y, la verdad, es que si realmente existe en el mundo «real-abstracto» algo que se llame «destino», estoy muy agradecido a ese «destino» de que me haya tocado estar dentro del pinchazo de la Bolsa. Uno asienta la cabeza y es más conservador y aprende muchísimas cosas. Más cosas de las que jamás hubiera pensado (habré aprendido cosas más valiosas que incluso en la ESO).
En cuanto a los amigos. A día de hoy no hay nadie que haya opinado mal de mí o, al menos, no he recibido ninguna queja. El caso de las chicas es un caso aparte, incluso aunque sean amigas, pero es que los vascos con las chicas… Cuando estoy en la Universidad, paso muy buenos momentos con ellos, y después estoy en un Colegio Mayor (residencia de estudiantes) y también me lo paso bien con los amigos que tengo ahí.
También me doy cuenta que en cada etapa de la vida, incluso educativa, algunos de los amigos comienzan a ser meramente conocidos, no amigos. En Primaria tenías unos amigos, en la ESO y Bachiller parecido (unos cuantos más ó unos menos), en la Universidad todos nuevos… cuando trabaje serán nuevos… a veces te apetece pasar una temporada fuera y conoces otras personas…
Así es mi vida, hasta hoy al menos, con 19 años.
En cuanto a Martín admiro que sea un tipo abierto y con visión, que sea un emprendedor e innovador.
La «ceguera» que dices que tengo por leer éxitos empresariales no es tal. Otra cosa es que me gusta aprender, buscar y corregir los problemas (aunque sean simples) de otros, pensar y proponer cosas, y con eso, encuentro oportunidades. Acostumbro a leer mucho sobre economía, negocios, etc. y precisamente no todo es «bueno, bonito y barato». Ni hoy ni nunca.
Saludos,
Jazztel_Bolsa
alex en agosto 6, 2007 ·
Lo que no entiendo es este rollo de que uno SÓLO puede divertirse bebiendo. Parece que si no bebes o eres tonto o eres un muermo o eres un raro. Lo que me parece bastante tonto, por no decir algo más fuerte, es que todos, TODOS, los fines de semana haya chicos de 14, 15, 16 años en las salas de urgencias totalmente borrachos y que las ambulancias recojan en todos los puntos de España chicos en estado de COMA ETÍLICO. Si esto es divertirse, ser inteligente y listo, muy mal están las cosas. Es más que obvio que, si el botellón es imparable, cosa que me parece delirante, es necesario que se adecúen zonas fuera de las ciudades pero con fácil acceso así la gente puede dormir y los chicos pueden «divertirse». En uno de los comentarios alguien comparó beber con bloggear(¡!) argumentando que si uno es responsable para bloggear también lo es para beber!!! evidentemente es un argumento que no se sostiene por ningún lado. Si alguien es responsable como para cuidar de sí mismo supongo que no va a hacerlo bebiendo como un cosaco. En otro comentario alguien da por sentado que interesarse por estudiar y aspirar a tener éxito empresarial no es compatible con divertirse y tener amigos. Y vuelvo al principio: si no vas al botellón eres un muermo! En fin….que a mí me parece que necesitar de la bebida para poder divertirse es más bien triste aunque quienes «practican» el botellón sigan empeñados en que es LO MÁS.
Javier en agosto 6, 2007 ·
Martin
Disfrazar como un «evento social» a la actitud mediocre y posmo que implica el botellon me parece terrible.
En mis epocas la gente iba a bailar, a reunirse con amigos, a charlar o a divertirse. Si habia bebida, atl vez (y solo tal vez) no te dabas cuenta de beber de mas y te ponías «alegre». El que se emborrachaba de forma tal que quedaba tirada en el suelo y vomitando era mal visto.
Hoy en dia la gente A BEBER, especificamente a EMBORRACHARSE y cuanto mas dados vuelta quedan son mas guays !!! Si en el medio de todo eso, hay charla, fiesta o musica…pues mejor. Pero si no lo hay, da igual, ya que luego de 20 minutos bebiendo nadie sabe si esta en un descampado de Algeciras, en Plaza Catalunya o en Bombay.
Entra en youtube y busca la cantidad de reportajes que hay sobre botellones donde los que a vos te parece que estan «charlando divertidos», en realidad estan balbucenado incoherencias, tratando de comprar pastillas o buscando pleito.
Seamos racionales: que charla «social» pueden tener personas que estan durante una hora metiendose litros de todo tipo de alcohol ? Cuanta coherencia puede haber en esa charla ?
Da la sensacion de que mucha gente, por ir de «moderna» y mostrarse como «comprensiva» nos tratan de tomar por idiotas.
Las cosas hay que decirlas claras: el que todos los fines de semana tiene como objetivo final el quedar borracho hasta el desmayo, NO es alguien divertido, es alguien que tiene SERIOS PROBLEMAS y el estado NO debe facilitarle las cosas sino buscarle tratamiento.
J
warren en agosto 6, 2007 ·
Hola a todos:,
He visto en el mismo post en inglés y le llamas nuevo fenómeno, Martín. Yo fui a mis primeros botellones hace 15 años. Tengo 31, soy el más pureta de los lectores de este blog?. Lo hacía por 3 motivos:
– Al principio lo hacíamos en casas de amigos, pero había obvias limitaciones de espacio, se caía ceniza en el sofá de tu madre, etc… Haciéndolo en la calle, nos encontrábamos toda la gente que conocíamos.
– Efectivamente ahorrábamos unas perras en la bebida.
– Evitábamos el fenómeno 0.0 del GARRAFÓN, tan extendido en España. Yo he pagado en alguna discoteca una pasta por garrafonazo tóxico, mientras que comprando en un super, te aseguras de que el alcohol es de calidad y que la resaca no te destroza al día siguiente.
Nacho en agosto 6, 2007 ·
Lo de «nuevo español adinerado» me ha llegado al alma. Creo que no habría que meterse en descalificaciones de ese tipo.
En cuanto al botellón, me temo que es una realidad como la copa de un pino, que los ciudadanos de dieciocho o veinticuatro años también cuentan y que hay millones de españoles que beben alcohol en la vía pública de esa manera (guste o no guste). El problema viene si se molesta a los demás haciendo botellón, es ahí cuando el gobierno y los órganos locales administrativos deberían intervenir y proponer regulaciones. Cosa que no hacen…
Saludos
PD:Gracias Martin por ser un nuevo español adinerado. Sin ti no habríamos conocido jazztel, ni ya.com, ni fon, ni netvibes, ni vpod….. :DDD
Nacho en agosto 6, 2007 ·
Añado algo a mi comentario anterior con respecto a jazztel_bolsa:
amigo mío, comenzaste a invertir en bolsa con doce años? permíteme que me haga gracia. y que me haga gracia también leer que el dinero no es tu objetivo en la vida: ganas cien, inviertes 50 y guardas 40??? y el dinero no es tu objetivo en la vida?? permíteme que te diga algo: al que no le importa el dinero, lo gasta.
como a mí también me gusta proponer cosas y buscar problemas de otros y solucionarlos, déjame que te de un consejo: echa mano del fondo que tienes para imprevistos y gastos extraordinarios, ve al corte inglés, compraté un disco de sabina y luego compras una lata de cerveza (con una te valdrá…). sería estupendo que te acompañara algún amigo.
suerte, inversor.
Gus en agosto 6, 2007 ·
Martin, estas con un perfil mega_empresario_progre, me gustaría saber si en tus épocas de inicio tenías ideas similares o fuiste evolucionando hacia estas formas. Se te nota en la vestimenta, ideas, etc.
Por otra parte, me acuerdo cuando vine a España, saliamos y a pagar donde podiamos segun nuestro presupuesto. Y lo pasamos de «diez». Juerga, chicas, noche larga, cervezas, amigos… interralacionarse con todo el mundo. No veo la gran diferencia con ahora, y esto fue durante todos los 90. y principios del 2000…
Los prinicpales perjudicados: los propietarios de viviendas devaluadisimas por la m..rda de zona tomada por miles de pibes, basura y ruido. Piensa si enfrente de tu casa Vars lo toman como zona de botellon.
saludos
El lopez de ayala tiene tela, pero bueno siempre hace falta uno que encienda la mecha
roberto en agosto 6, 2007 ·
La presión social que existe para que la gente beba alcohol es fortísima en todo el mundo. En España se le une esa tradición cultural de socializarse haciendo vida en la calle y esa fijación que tienen algunos en empeñarse en que el que esté cerca de él se drogue, supongo que para llegar juntos a la fase de exaltación de la amistad que las drogas deshinbidoras provocan y que les hacen creer que son libres y felices.
Martin Varsavsky en agosto 6, 2007 ·
XL,
Muy bueno lo de que limpiarlo no es 2.0, pero se podria exigir que la gente limpie. El problema de la limpieza y la bebida es el ejemplo que dan los bares y el comportamiento de los españoles tirando todo por el suelo.
Martin Varsavsky en agosto 6, 2007 ·
En mi blog en ingles hay un comentario interesante de David Verde, un español que empezó a hacer botellones en Suiza y ahora sugiere hacerlos en Second Life.
Martin Varsavsky en agosto 6, 2007 ·
Alex,
Aclaro algo curioso sobre mi. No me gusta ninguna bebida alcoholica, salvo el vino, que me empezó a gustar a los 32. No me gusta nada la cerveza ni las copas y siento y siempre sentí una desagradable presión social para beber.
Hoteldipity en agosto 6, 2007 ·
El botellon no ocurre en usa 😛
Miguel Ángel en agosto 7, 2007 ·
Hola a todos!
Yo soy de Mallorca y ese fin de semana estuve en el marítimo y te puedo asegurar que nunca había visto tanta gente. Creo que el motivo de que hubiera tanta aglomeración era por el final de las regatas y me imagino que lo estaban celebrando…
Rebeca en agosto 8, 2007 ·
Hola Martín,
Soy una chica de 27 años y en toda mi vida he ido sólo dos veces a botellones, la primera por probar (me pareció horrible) y la segunda por obligación social (un amigo se empeñó en que fuera).
Una vez he advertido que no soy partidaria de ellos, pasaré a razonar con la máxima nitidez posible por qué no los considero interesantes, partiendo de mi experiencia, que fue la siguiente:
1.- Llegas a un descampado donde ves a un montón de chicas en minifalda y con tacones en mitad de la nada, obligadas a permanecer de pie durante horas con arena y piedrecitas en sus incómodos zapatos. Los chicos generalmente se ocupan de «la intendencia»: suelen ser los propietarios de los coches, mantienen el chunda-chunda bien alto y controlan el avituallamiento de bebidas. Ellas se ocupan básicamente de permanecer de pie encaramadas en sus tacones sucios de tierra.
2.- Las conversaciones suelen ser agradables y el ambiente distendido, sobre todo entre los chicos, que van más cómodos y ocasionalmente se sientan en el suelo con sus vaqueros de marca por unos minutos. Las chicas tienden a adoptar una actitud sumisa, pero ocasionalmente pueden gastar bromas y divertirse; a diferencia de ellos, casi nunca se sientan y la expresión de su cara es cada vez más incómoda. Estoy convencida de que la mayoría de ellas preferirían usar sus preciados tacones en un bar donde poder sentarse.
3.- El ambiente agradable invita a beber mucho y casi nadie consume menos de 4 cubatas a lo largo de la noche; el consumo medio está entre 4 y 6, cargados con una cantidad ostensiblemente superior de alcohol a la que suelen poner en los bares.
4.- La música, si la hay, es tremendamente mediocre: sale de los coches de algunos de los «botelloneros» y no pasa de ser un chunda-chunda infame, o bien una sucesión de típicas canciones de verano tipo Tata Golosa. Pero los chicos que tienen sus coches tuneados con altavoces especialmente potentes con este fin son especialmente apreciados por el grupo.
5.- No puedo afirmar qué grado de intoxicación etílica alcanza el grupo porque las dos veces me marché en un par de horas y a punto de morir por aburrimiento, pero desde luego si a mí me obligaran a permanecer tanto tiempo como el resto en un ambiente tan deprimente como aquél, me habría bebido botella y media de Jack Daniel’s por lo menos.
Seguidamente pasaré a explicar cómo se desarrolla la noche en un (buen) bar, en el siguiente post.
Rebeca en agosto 8, 2007 ·
Bien, ahora os voy a detallar qué tipo de salida me gusta hacer realmente por la noche:
1.- Cojo 10 o 20 euros (realmente no hace falta más) y el abono transportes para ir al centro. El destino: un bar con música en vivo, normalmente blues, a menudo también rock u otros tipos de música. En ocasiones voy a bares con música grabada, pero donde se pueda charlar.
2.- Después de 20 minutos, llego a una placita del centro donde me esperan mis amigos y nos dirigimos juntos al bar, donde buscamos una mesa libre. Normalmente no llegamos temprano y nos vemos obligados a compartir mesa con alguien, pero eso es bueno porque acabas conociendo a gente muy interesante.
3.- Si el bar tiene música en vivo, la bebida es más cara, así que no podemos consumir entre 4 y 6 cubatas (tampoco tenemos intención de emborracharnos). Lo habitual es que una cerveza cueste en torno a 5 euros, así que con 20 euros tengo para un máximo de cuatro cervezas.
4.- Pasamos una media de tres – cuatro horas en el bar, primero escuchando al músico y cruzándonos frases cortas de entusiasmo. Es emocionante saber que estás escuchando a algo que no se repetirá, que descubres a un músico que probablemente antes no conocías. Naturalmente, muchos conciertos no son lo que esperabas, pero al menos estás intentando ampliar tu espectro musical en vez de mutilarlo con los engendros que salen de los coches tuneados.
5.- A eso de las tres de la mañana, si has salido con poca pasta, coges el autobús de vuelta. Si no, todavía puedes intentar tomarte una copa en alguno de los excelentes bares que hay por Malasaña.
6.- En resumen: al estar en la ciudad y no en un descampado, te sientes más seguro y tienes mejores medios de comunicación. Pasas la noche haciendo cosas interesantes y charlando con tus amigos (y seguro que la conversación es mejor que en el ambiente deprimente del botellón) y puede que te hayas bebido 4 cervezas o a lo sumo un par de cubatas, pero no vuelves borracho a casa. Yo no necesito perder el sentido para divertirme.
Conclusión Primera:
Mejor un par de cervezas bebidas con tranquilidad en un bar interesante que hartarse de ron en mitad de la nada escuchando raggaeton (lo del ron no es por nada, me encantan los mojitos).
Conclusión Segunda:
No hace falta ser rico para ir a buenos bares con actividades originales y divertidas. Puede que sí haga falta ser rico para emborracharse en buenos bares…. Así que entiendo que si tu prioridad no es pasar una noche divertida sino cogerte una cogorza, te vayas de botellón. Sale mejor de precio.
Conclusión Tercera:
No digo que haya visto grandes borracheras en el botellón. Lo que digo es que me parece incomprensible que la gente no se emborrache mucho más para escapar de ese ambiente tan tremendamente cutre y deprimente en el que voluntariamente se meten.
En fin, es mi visión como joven que ha vivido durante todos sus años universitarios en Madrid y que ha salido mucho y disfrutado a tope. Los botellones los he vivido en Extremadura, la tierra donde nació el fenómeno (donde viví hasta los 18 años y vuelvo ocasionalmente).
Rebeca en agosto 8, 2007 ·
Ahora paso a detallar lo que realmente me gusta hacer por las noches: ir a bares con conciertos o actividades programadas como performances o exposiciones. En estos bares o bien te cobran una entrada (normalmente como máximo 6 euros con consumición incluida, y me consta que en los pubs sin actividades hacen lo mismo) o bien te cobran un suplemento en la bebida. A mí especialmente me gusta ir a La Coquette, un bar de conciertos de blues donde optan por la segunda opción (suplemento en la bebida) y una cerveza te sale cara, creo recordar que unos cinco euros.
Normalmente no gasto más de 20 euros en una noche.
Voy en transporte público al bar (porque no está en mitad de un descampado) y entro con mis amigos. Normalmente está tan lleno que te ves obligado a compartir mesa con algún desconocido, pero eso está bien porque terminas conociendo a gente muy interesante.
Es emocionante saber que podrás descubrir a músicos desconocidos y que la música que escuchas, al ser en directo, no volverá a repetirse.
Charlas, ríes, disfrutas de la música e incluso sin pensarlo ligas. La noche es tan agradable que la cerveza se te calienta en el vaso. Al terminar la noche, te das cuenta de que sólo has consumido dos o tres cervezas, así que incluso te sobra dinero. Puede que la bebida sea más cara, pero si tu prioridad no es cogerte una cogorza la noche tan divertida que pasas lo compensa.
Vuelves a casa de nuevo en transporte público, sin arriesgar tu vida y con la sensación de que has vivido una noche irrepetible, mágica y sin piedrecitas en los zapatos.
Así he salido por Madrid durante años. Los botellones que expliqué en el anterior comentario los viví en Extremadura, donde nací, y la verdad es que no cambio la posibilidad de emborracharme con botella y media de Jack Daniel’s mientras me ensucio el vestido por la posibilidad de pasármelo en grande hablando en inglés con un par de italianos macizos mientras un músico desconocido se marca un solo magistral de guitarra.
Es mi elección.
Oliver en agosto 14, 2007 ·
Yo no soy del Opus ni soy ¿inbancable?… se referirá a IMBANCABLE. Hay que ver como son estos inmigrantes del tercer mundo que creen ser del primero pero en realidad descendieron de categoría y aún no se han enterado. Supongo que en otras latitudes, ahora venidas a menos, será del agrado del respetable que la gente se emborrache, grite y haga sus necesidades delante de la puerta de tu casa, pero, eso si, en plan 2.0, que debe ser algo así como las 20 megas que juran prestar determinadas operadoras de internet a sus futuros clientes. Es decir: incomprensible. ¿Que es necesaria una solución al botellón y, si es posible, contente a todo el mundo? estoy de acuerdo, pero creo que no se va a lograr mediante palabrería bonita, muy adornada y hueca como la cabeza de algunos.
Rebeca en agosto 14, 2007 ·
Oliver, no debería contestar a tu comentario puesto que ya delatas tú solo qué clase de catadura moral tienes. Imagino que tienes algún tipo de complejo de inferioridad por esa obsesión que tienes de compararte con los que vienen de fuera. Da la casualidad que las dos veces que fui de botellón en mi vida (y ambas había más de mil personas bebiendo) no vi ni una sola persona de «otras latitudes», o inmigrantes sudamericanos, que es lo que realmente quieres decir. Puesto que en el momento en que fui el botellón era un fenómeno acuñado por los paletos de mi pueblo, los paletos de fuera no participaban. Posteriormente en Madrid he visto una proporción similar de nacionales/foráneos tanto en bares como en el botellón de la calle (inciso: el único botellón madrileño que vi que merecía la pena era el de la plaza 2 de mayo. Pero esto merece mención aparte, y lo considero la excepción que confirma la regla).
Por cierto, ¿consideras inmigrantes a los estudiantes Erasmus anglosajones que vienen a España a ponerse hasta arriba de alcohol en los botellones y consumir pastillitas en las discotecas? ¿Consideras más elegante una reyerta de borrachos si estos son de una latitud más al norte de España? ¿Rechazas todas las latitudes que no sean la española o sólo aquéllas que están más cerca del Ecuador? ¿Eres más morenito de lo que te gustaría? A lo mejor tienes genes judíos, como Hitler…
Lectores no españoles, no juzguéis a la gente de nuestro país por cuatro nostálgicos de la era del aguilucho.
Saludos.
Oliver en agosto 16, 2007 ·
Sabía que me arriesgaba, cuando decidí exponer mi opinión, a que «alguien», por denominarlo de alguna forma algo, echara mano del racismo y del nazismo, términos que ignoro sabrá aquilatar en su justa medida, para ponerme de vuelta y media. Está tan de moda llamar a cualquiera, sobre todo que no esté de acuerdo con nuestra opinión, nazi, fascista, franquista y xenófobo que ha terminado por convertirse en un insulto más. En realidad, aparte de ser un error (pero que al cometerlo parece ser que da mucho placer) disminuye drásticamente las posibilidades de ofrecer una argumentación con garantías. Supongo que deberé resignarme y ponerme al día rápidamente (al día de lo que a algunos/algunas les gustaría que todo el mundo participase, entendiese y asimilase de manera disciplinada y sin salirse de la vereda porque sino serían castigados), desechar de una vez que, por desgracia, tengo ideas independientes y que no participo de lo políticamente correcto.
Yo no asistí a ningún botellón: los padecí cuando estaba en la universidad (mejor dicho en las Universidades Politécnica de Madrid y Autónoma, donde obtuve mis titulaciones) Eso es todo cuanto puede aportar mi experiencia. Pero, ahora bien, si afirmas que el único botellón, como otro de tantos, que «merecía la pena» fue en el que tuviste ocasión de asistir en la Plaza del 2 de Mayo imagino que ignorarás la opinión de los sufridos vecinos de dicha plaza y aledaños. Por cierto, ¿qué hay que merezca la pena en un botellón?, ¿de verdad entiendes el sigificado que entraña la frase catadura moral? Prefiero no saberlo.
No voy ni a insinuar que, tal vez, deberías aprender a interpretar lo que lees. Decía, e insisto, en que en otras latitudes debe ser costumbre eso de ponerse a beber sin un motivo aparente. Y para muestra un par de botones. Te sugiero que, por ejemplo, te pases por la Plaza de Benavente, en Madrid, un sábado a las 4 de la tarde, y constantes las nacionalidades a las que pertnecen los señores que se están bebiendo los cartones de vino. Y el otro lugar, la plaza (cuyo nombre no recuerdo ahora) que se encuentra en un lateral de la Real Casa de Correos, es decir la sede de la Comunidad Autónoma Madrileña. Insisto, para que lo tengas claro, en que a este fenómeno, como decía en el anterior post, se le ha de encontrar solución y los primeros que han de estar aportando ideas, programas y alternativas son las Administraciones públicas, tanto estatales y autonómicas. Aspecto éste que has soslayado sospechosamente para centrarte únicamente en mi presunta afiliación neonazi ultrarafascista y franquista ¿te vale con eso o incluyo también, y para no despreciar a nadie, el estalinismo y la ultraizquierda más radical?
Supones que padezco cierto sentimiento de inferioridad hacia los que vienen de fuera. Nada más lejos de la realidad (y no tengo ningún motivo para explicártelo; si te lo quieres creer te lo cres y si no pues…). Soy madrileño por tercera generación (rara avis) y si de algo me siento orgulloso es que en esta ciudad nadie es ni se siente extranjero; es una urbe cosmopolita y abierta al universo (incluso acepta en su seno a ignorantes mediatizados) a pesar de lo que se piense y se diga en alguna que otra ciudad. A mi molesta que sea quien sea, proceda de donde proceda, se sienta como se sienta, se pase de listo, rompa con las más elementales normas de convivencia y, en pro de un libertinaje que se carga toda ansiada libertad, disponga según sus caprichos y deje cualquier espacio público arrasado (¿admite tu ideario el concepto de lo público?) ¿Esto es ser un nazi o un franquista?
Por último, no voy a perder más el tiempo contigo, y, sobre todo, no deseo molestar más al resto de los participantes, si digo que en otras latitudes, en este caso del Sur de América, este fenómeno parece ser visto con otros ojos es porque me molesta que el autor y promotor de este blog hable tan a la ligera, ¿y en plan 2.0?, de un fenómeno social que tanta controversia suscita. Igual me hubiera dado que hubiera sido chino, español o congoleño, me hubiera referido a él de igual manera; aunque, si bien, el señor Varsavsky acepta las funestas consecuencias de esas «lúdicas» reuniones. Y por cierto, para ser justo, también he de agradecerle su paciencia, comprensión y benevolencia por haberme permitido participar en este debate tan candente. Pero claro, mientras tanto, tú, Rebeca, adalid de los imposibles has cogido el rábano por las hojas ¡y al ataque!, ¡a por el presunto facha! Bufff… si esto es todo lo que tienes que aportar…
Y no, de ninguna manera, no admito que otros vengan a hacer aquí lo que en sus paises no está permitido. Me refiero, y para que no sufras por mi presunta afición a la raza aria, a todos los europeos que vienen a nuestro país a coger cogorzas durante un fin de semana patrocinadas, via vuelo chárter, por empresarios tal y como parece suceder en las Islas Baleares. Viaje muy barato en el que, además, se incluye hotel, discoteca y bebida a raudales.
Ah, soy morenito y bastante feo, pero me encanta. Estoy conforme conmigo mismo ¿y tú?; ¿mis genes? pues es una cuestión que jamás me ha preocupado; ¿a tí te preocupa? Seguro que sí.
Lectores españoles y no españoles, por favor no penséis ni por un instante que todos somos como otros que si son nostálgicos (sin ser conscientes) que son autoritarios, adoctrinados en el Pensamiento Único y reaccionarios de la Nueva Era, que interpretan bajo su estrecha perspectiva, juzgan y condenan a todos aquellos que se muestren en contra de su opinión. A Rebeca le encantaría que todos desfiláramos al paso de la oca mientras suena su música favorita, que todos vistiéramos según sus gustos y que viviésemos conforme a sus restringidas reglas de libertad y civismo.
Abrazos.
P.S: Lo he pensado mejor. Rebeca puedes volver a contestar o no, allá tú. Puedes, una vez más y si lo estimas oportuno, descargar toda tu incontenible ira, pero te aseguro que me he aburrido tanto escribiendo las líneas precedentes que no me han quedado ganas de repetir. Lo reconozco: me has vencido.
ANA en agosto 16, 2007 ·
CURDAS(beodos,alchólicos etc)DEL MUNDO UNIOS!
Rebeca en agosto 19, 2007 ·
Estimado Oliver:
No te acuso de racista, en realidad te incluyes tú mismo en ese grupo ideológico (ya se sabe que a menudo quien tiene ideología carece de ideas) porque el hecho objetivo es que rechazas a personas «de otras latitudes venidas a menos». Salvando el hecho de que las latitudes por sí mismas no pueden venirse a menos (constituyen un medio de posicionamiento geográfico constante) supongo que te referías más bien a latitudes que consideras «inferiores», es decir, por ser menor el número que las designa, más cercanas al Ecuador. No es culpa mía si no dominas el lenguaje lo suficiente como para que tus ideas coincidan con lo que dices. No obstante, dudo mucho que realmente tus ideas disten tanto de lo que has expresado anteriormente en este post.
Antes de pasar a rebatir punto por punto todas tus alegaciones, me gustaría aclarar que, como ya expresé en el comentario número 38 de este mismo post, en el comentario número 12 del post «Learning how to drink before learning how to drive» y en el comentario número 9 del post «Botellones: User Generated Bars», no me gusta el fenómeno social de los botellones por razones ampliamente explicadas en dichos comentarios. Sin embargo, considero particularmente estúpido alegar que rechazas los botellones únicamente por la raza o el origen de las personas que acuden a ellos. Lo considero estúpido porque es una estrategia de relación social poco inteligente si vives en una ciudad plural como Madrid (aclarando no obstante que yo tampoco apoyo esa manía de «caer bien a todos» mediante la corrección política) y también lo considero estúpido porque tiene la misma equivalencia lógica que decir que no te gustan las pelis de Meg Ryan porque hay muchas flores en primavera. Seguidamente, como ya indiqué antes, pasaré a mostrar a todos la absurdez o absurdidad (si los lectores quieren un término acuñado por la RAE) de tus débiles alegaciones, que no llegan a argumentos porque no eres capaz de formular silogismos correctos.
Para comenzar, te diré que de ordinario interpreto muy bien lo que leo. Mi trabajo como correctora literaria y mis numerosos premios de narrativa hacen que me desenvuelva con naturalidad a la hora de lidiar con el lenguaje. Veo, por ejemplo, que ahora has elegido no utilizar la sorprendente expresión «latitudes venidas a menos» y simplemente hablas de «otras latitudes», suavizando y ampliando sin duda tu mensaje para que parezca que te referías a todo aquel que no está en España. Pero lo cierto es que te delataste al hablar exclusivamente de «inmigrantes» y te olvidaste por ejemplo de mencionar a los turistas, casi todos ellos de países con mayor nivel de vida que España y que a menudo vienen aquí a emborracharse hasta perder el sentido sin gastar demasiado dinero. Ese olvido tuyo de mencionar a los turistas europeos (y no son pocos) es un signo de lo que Freud llamaba «acto fallido» (de ahí mis preguntas sobre lo que podría ser un complejo de inferioridad tuyo). Ambos sabemos que no pensabas en suecos o en alemanes cuando hablabas de inmigrantes, aunque ahora pretendas quitarte de encima el epíteto de «xenófobo» para intentar tildar de exagerada mi argumentación en un intento desesperado. Yo no te he llamado xenófobo ni racista: simplemente te he pedido que concretes tu mensaje porque era tendencioso y estaba planteado con la vaguedad justa como para ofender a los lectores extranjeros de la forma más vergonzante para quienes compartimos nacionalidad contigo y también retractarte cómodamente después como has intentado hacer ahora. Tu estrategia es la misma actitud mediocre de Jiménez-Losantos, capaz de soltar sermones inconsistentes desde su programa pero incapaz de sustentar sus ¿ideas? en algo sólido como la argumentación racional basada en hechos constatables. Ambos sabéis únicamente dosificar los golpes de efecto en vuestras arengas sin aportar ideas constructivas, porque carecéis de ellas.
Mencionas equivocadamente que te he llamado xenófobo: si repasas mi texto, verás que, en realidad, sólo constato ante todos la consecuencia lógica y directa de las palabras que aquí has vertido tú mismo. A diferencia de ti, conozco el significado de la palabra silogismo. Jamás utilizo efectismo ni palabras vanas, o en realidad sí, una vez, pero al final: cuando te llamé «nostálgico de la era del aguilucho». Era tan cómico tu texto que tenía que responder en justa medida, y de hecho intenté que fuera evidente que no era más que una salida histriónica. En cualquier caso, ignoro si eres partidario del régimen totalitario de Franco o de alguna otra dictadura, aunque lo que está claro es que te sientes incómodo en democracia, como les ocurre a los aguiluchos y a las aves de rapiña, incapacitadas para la convivencia y de hábitos solitarios. Si lo deseas, puedo retirar esas palabras para pasar a afirmar, según lo que tú mismo afirmas en tu texto, que eres un xenófobo (según la RAE, persona que siente odio, repugnancia u hostilidad hacia los extranjeros).
En cuanto a los lugares que mencionas del casco antiguo de Madrid, casualmente los conozco muy bien y son frecuentados por una proporción de extranjeros exactamente idéntica a la proporción de extranjeros existente entre las personas que salen de copas «legalmente», esto es, por los bares de esa zona de Madrid. Si estimas que dicha proporción genérica en las calles del casco antiguo (no sólo en los botellones) es excesivamente grande, esto es asunto de otro debate. Lo que pretendo hacerte entender aquí es que la proposición «No me gustan los botellones porque los únicos borrachos que mean en la vía pública son los extranjeros» es completamente inválida desde el punto de vista lógico, aunque eso viniendo de alguien que no sabe si utilizar el pseudónimo Oliver o Fernando López de Ayala no debería extrañarnos demasiado. La incoherencia nunca ha convivido bien con la lógica.
Me gustaría proseguir explicando por qué pregunté si tenías «complejo de inferioridad». No sé si has leído «Don Juan. Ensayo sobre el origen de su leyenda», un libro del doctor Marañón donde con bastante agudeza nos destripa el mito del mujeriego don Juan y lo presenta a nuestros ojos como un misógino con tendencias homosexuales que, por un miedo inconsciente a ser descubierto, adoptaba estrategias vitales completamente contrarias a sus verdaderas tendencias y deseos. Se trata de una aproximación muy poco sistemática al complejo de inferioridad y seguramente hay obras más serias escritas por psicólogos reconocidos, aunque este ejemplo me pareció bastante ilustrativo. Asimismo, es bastante unánime la opinión de los analistas psicopolíticos con respecto a Hitler y la mayoría de los tiranos que han sometido a la humanidad: el complejo de inferioridad, evidentemente combinado con otros factores, fuerza en ellos un patrón de conducta dominante y negativo que los convierte en dictadores perfectos. En el caso de Hitler se sabe además que tenía ascendientes judíos y que probablemente se odiaba por ello, sublimando ese odio en la bestial masacre que practicó con ese pueblo. Por eso me pregunto, puesto que tan irracionalmente y con tanta vehemencia denigras a las personas pertenencientes a «latitudes venidas a menos» o inferiores, si no será que tú mismo tienes ascendientes de esas mismas latitudes, como Hitler u otros acomplejados.
Me gustaría incidir por último en esas ideas políticas que me atribuyes con tanta fantasía. Nunca he tenido sueños eróticos con soldados al paso de la oca, aunque he de decir que me ha parecido muy evocador. Hablando ahora en serio, rechazo los totalitarismos, sean del signo que sean. No sé si eso te tranquiliza a ti o a alguien más que pueda leernos. Creí que era evidente por mi forma de hablar y razonar. También querría decirte que, como demócrata convencida que soy, no esperaba ningún permiso tuyo para contraargumentar, como era esperable. Creo en la libertad de expresión, incluso en la de los imbéciles, los que se declaran feos como tú y los fans de Isabel Pantoja. No obstante, también querría decirte que no tengo pensado responderte en lo sucesivo: estamos intentando hablar sobre los botellones y su beneficio o perjuicio, no sobre las ideas políticas o los traumas de cada uno, y no me gustaría aburrir al resto de los lectores con absurdos intentos de hacer pensar a personas como tú. No considero inteligente luchar por las causas perdidas, los cerebros perturbados o la pervivencia de la tradición de la canción del verano.
No considero que los botellones sean en sí mismos ni buenos ni malos: para mí son sencillamente cutres, una expresión más de la decadencia cultural que experimenta nuestra sociedad.
Espero que todo esté claro, porque me da mucha pereza repetirlo.
Buenas noches.
ANA en agosto 20, 2007 ·
Oliver y Rebeca no peleen junténse a tomar unos vinos y alegren la vida que es una sola.OLVIDENSE DE FRANCO,HITLER ETC ERAN TODOS VIEJOS FEOS CON CARA DE ABSTEMIOS.
CONSEJO DE SUDACA BIEN SUDACA QUE VIVE EN SU PAIS Y NO MOLESTA.
martin en octubre 12, 2007 ·
La gracia está en que es espontáneo.
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Pasaba por aquí en agosto 4, 2007 ·
Hola Martín, si que tardas en ir a dormir…