En general el inglés es un idioma más económico que el castellano para decir las cosas. Se dice más con menos palabras. Tax the Fat es un documental a la Michael Moore (a quien probablemente no le gustaría el documental) que propone cobrar un impuesto a la gordura.

Pero tax the fat suena mucho mejor que impuesto a la gordura y por eso lo puse en inglés. Pero yendo a la idea en si cuento que al principio la idea me pareció directamente fachista. Al final del documental, ya no tanto. Claro, si te ponen una hora a dar un punto de vista sin ver el contrario no es tan difícil que te convenzan de cualquier cosa pero voy a explicar las ideas claves del documental y decir que el documental si me convenció de que el problema de la obesidad (ya tratado en Super Size it) es muy serio pero no en la solución propuesta.

Estas son las ideas básicad del documentad filmado en el Reino Unido.

-en el Reino Unido se calcula que la obesidad le cuesta a los contribuyentes 1600 millones de euros por año.

-si los fumadores pagan impuestos especiales, si el alcohol tiene impuestos especiales, ¿por qué la comida que engorda mucho o la gente gorda no tendría que pagar impuestos especiales?

-los impuestos son una manera muy eficaz, casi la única de conseguir que la gente consuma menos de un producto o cambie su comportamiento.

-si se hacen controles de alcoholemia para evitar accidentes viales por qué se deja conducir a gente muy obesa cuando esta también pone en peligro al resto de los habitantes.

-más de la mitad de la gente del Reino Unido es ahora gorda u obesa una situación que ha empeorado rápidamente en los últimos 30 años, algo hay que hacer.

-los argumentos de que los gordos son genéticamente gordos no tienen sentido ya que si antes la población no era gorda y ahora lo es ¿donde estaban esos genes?

-el documental argumenta que la gordura es una adicción como el alcoholismo y el tabaco y que si hemos logrado cambiar la idea de que un fumador era sexy a que un fumador sea lo opuesto que hay que hacerle entender a la gente que la obesidad mata y que no hay nada bueno en ella.

Personalmente no se si cobrar impuestos especiales a los gordos o a la comida que engorda es la solución pero la obesidad es una plaga de la sociedad moderna que no para.

Este verano estuve en Universal Studios en Los Angeles y una de las cosas que más atención me llamó era el tema de que cuando te vendían las entradas te ofrecían estos «all you can eat passes» que te ofrecían comida, comida, y comida, que la gente comía todo el tiempo, todo tipo de comidas y que en general como se ve en las fotos eran muy pero muy gordos.

¿Mi conclusión? Si creo que la obesidad es más que nada una adicción, adicción a la comida, pero como las otras adicciones no creo que la solución pase solo por penalizar a la gente gorda con medidas fiscales. Además como dice el documental los obesos ya pagan más por seguro médico, más por comida y a diferencia de lo que dice el documental creo que los obesos si pagan un precio alto por la visión negativa que la sociedad tiene de ellos. No es con crueldad que se va a solucionar este serio problema social.

Sigue a Martin Varsavsky en Twitter: twitter.com/martinvars

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XL en octubre 15, 2006  · 

Es un tema que lleva mucho tiempo discutiendose, y yo estoy a favor de que se grave la comida grasa con más impuestos, no se trata sólo de educar a los niños, hay que gravar la comida según las grasas que contengan, el número de calorías…

A parte abría de publicarse mucha más información en la comida.

Si el Menú Mc Donalds lo gravas con 2€ más por los acites que usan, seguro que o cambian de aceites y de grasas y lo hacen más caro por un incremento de calidad, o lo harán más caro por culpa de sus impuestos sin que el cliente reciba algo mejor a cambio.

Obviamente esos impuestos no tan sólo tendrían que ir a recaudar para mejorar la sanidad, si no a realizar inspecciones en restaurantes fábricas supemercados, para que se comprobase la calidad real. Si 50 restaurantes han de pagar 300€ al mes en Impuestos por comida basura, generan 15.000 €, creo yo que el coste de un inspector que visite los 50 restaurantes 1 vez al mes no será superior a 3.000€ así que queda mucho márgen.

Por otro lado se disuadiría a las rentas más bajas a cambiar sus habitos alimentarios, ya que al contrario de lo que piensa la gente la obesidad en los paises desarrollados afecta más a las rentas medias-bajas, ya que las más altas, tienen un mayor acceso a otros alimentos (pescado fresco, carne de calidad aceite de Oliva, comida fresca…) a parte de una sanidad privada.
El crear esta nueva necesidad haría cambiar a los productores el tipo de productos que elaboran.

Lo dicho las enfermedades derivadas de la mala alimentación matan a mucha más gente que el tabaco, y en cambio no nos avisan de lo nocivo que son algunos productos, ni pagamos impuestos recaudatorio-disuasivos como con el tabaco.

Por cierto no soy partidista por que soy gordo y no fumo.
Y a pesar de que podría pagar el impuesto, creo que me mentalizaría de que es malo comer según que cosas.

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Laser15 en octubre 15, 2006  · 

Hola,
¿qué motiva a un gordo a comer?.

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Angelus en octubre 15, 2006  · 

Sr Varvasasky la obesidad no es meramente un problema de adiccion a la comida . Muchos obesos morvidos padecemos obesidad endogena lo que nos hace engordar desmesudaramente si no estamos medicados y/o controlados asi que no generalice Gracias

http://es.wikipedia.org/wiki/Obesidad

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miguel galve en octubre 15, 2006  · 

si que están rellenitos si…

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f.v en octubre 15, 2006  · 

Lo que yo creo sr Varsavsky es que cada uno debe tener la libertad de vivir como desee (gordo o flaco) y que el problema reside en el sistema de contribución, ya que si la sanidad fuera privada cada uno aguantaria con los gastos que acarrea estar o no obeso…y ya verian como alguno perdia peso rápido

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Marga F. Rosende en octubre 15, 2006  · 

¿Penalizarán la caspa algún dia?. También cuesta pasta, sobre todo al que la tiene….

Pdt. jooo, esto tiene mala memoria, nunca recuerda mis datos…aunque diga si.,,snif, snif. A copiar otra vez.

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Cristian Sepúlveda en octubre 15, 2006  · 

Hola, soy Chileno, y en Chile no hay tanto obeso mórbido, si hay mucha gente que tiene kilos de mas, pero no hay tan mórbidos como en USA.

El año pasado viví en el Silicon Valley y ahí si que vi gente morbida, y MUCHA. Les cuento que una de las grandes diferencias con Chile, es que en USA es mucho más barato y fácil comer en una tienda de comida rápida que comer en casa, en USA almorzar una hamburguesa con french fries y coca-cola cuesta entre US$7 y US$9 aprox. En cambio, preparar comida en casa, contando solo el costo de los abarrotes era de aproximadamente US12 a US15. sin contar el tiempo invertido en la preparación de la comida y el lavado posterior de la loza.

Si en una familia gringa el papa y la mama trabajan y no tienen mucho tiempo y en cada comida te gastas entre US$3 a US$5 dólares extra por persona si decides comer en casa…son aprox. 10 dólares diarios adicionales por persona…sacando cuentas, son varios dólares al mes, por lo tanto por economía corto placista, las familias comen en McDonalds. En Chile es al revés, es mas barato comer en casa que en una tienda de comida rápida.

Si tú comes en casa, de seguro no preparas “Chicken Wings Ultra Hot Spicy” con “french fries” y “Super Double Hambureger Extra Chesse” todos los días, de seguro comes cosas más sanas.

Otra diferencias es que en USA el precio relativo de las frutas y verduras es mucho mas caro que en Chile.

Bueno, dado todo eso, ahora no me extraña que existan tantos obesos mórbidos en USA.

Si lo miramos desde un punto de vista de macroeconomía, Está claro que el aumento de personas obesas trae un problema a la sociedad en conjunto, por el gasto social requerido, por lo que me hace mucho sentido cobrar un impuesto a las empresas que venden productos que engordan, cómo coca-cola o McDonald´s etc. ademas subvencionaría o daría facilidades a las frutas y verduras o productos naturales.

Saludos desde Chile.

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martinvives en octubre 15, 2006  · 

Yo me fui a EEUU con 177 y 70Kg y volví 10 meses más tarde con unos centrímetros más y 80Kg. Y muchos de los que fueron como yo en mi programa AIE, igual.

Los americanos siempre piensan a lo grande en muchos aspectos. Y en la comida también.

Free refills, grandísimas raciones, comida rápida por todas partes. Y no solo cuanto comen, sino lo que comen.

Incluso una ensalada, que podría ser saludable, se convierte en una bomba calórica con todas las salsas «thousand islands», «ranch»… con las que la aliñan.

En el instituto expendedoras de botellas de medio litro de refresco a un «buck» por todas partes, chiringuitos de comida rapida. Y en el MENU escolar desde pizzas refritas a patatas fritas que del aceite que llevaban podían brillar en la oscuridad.

PERO OJO:

He estado en alemania y también se ven muchos obesos. Y en España estamos más cerca de lo que nos pensamos.

Y es que creo que la obesidad forma parte de las enfermedades del mundo desarrollado (como les llamo yo), como el stress, problemas sexuales, etc. Que no vienen derivadas de la escasez sinó del exceso.

PD: Aunque no tenga nada que ver con el post, recomiendo a todo el mundo que lea «El malestar de la globalización» de Joseph Stiglitz.

Saludos desde el Mundo

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XL en octubre 15, 2006  · 

Los ggringos no sólo comen fuera, el problema es que no tienen tiempo de cocinar y tiran por los precocinados…

Es por eso que si los gravas e indicas su contenido, los desarrollarán más sanos

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Antonio en octubre 15, 2006  · 

Una vez más, cuando se desconfía del criterio de las personas para utilizar su libertad se recurre a los impuestos.

Además, ¿qué es eso de que los obesos cuestan más al Estado? ¿Y los torpes? ¿No cuestan también más porque tropiezan más y tienen más accidentes? ¿También hay que ponerles un impuesto a ellos? ¿Sobre qué? ¿Sobre las tiritas? Claro que a un torpe no se le identifica a primera vista salvo que sea un caso muy extremo.

Y no estoy fivolizando, considero que la obesidad es un problema muy serio. Tanto como el cáncer de piel que cada vez es más frecuente y además más letal. Hasta que alguien invente un impuesto por tomar el sol para solucionarlo y de paso sufragar los gastos extras en sanidad que esto genera.

¿Tan inmaduros se nos considera a las personas que sólo entendemos si nos tocan el bolsillo?

Como dijo el filósofo, no es esto, no es esto.

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XL en octubre 16, 2006  · 

Entonces Antonio no eres partidario de que se paguen impuestos por el tabaco???

El tema de disuasión, no es sólo por que ahora hay algunos obesos, el problema es que cada vez hay más y la juventud es más gorda, y eso hay que evitarlo, y una de las mejores formas es gravar los alimentos grasos, a la vez que obligar a publicar más información sobre el contenido.

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Manuel en octubre 16, 2006  · 

Y… ¿por qué no se hacen inspecciones y se multan a las empresas alimentarias que usan grasas muy perjudiciales para la salud porque son más baratas?…

¿Por qué no se inspecciona a la Empresa láctea que quita la grasa a toda la leche para hacer otros subproductos con ella y luego ‘rellena’ la leche entera con grasas de dudoso origen?

El fumar, el beber alcohol, en exceso pueden ser un vicio… el comer es una necesidad básica.

Y muchas personas que hoy en día son obesas, comienzan como personas delgadas y saludables que por culpa de tener que comer fuera de casa, en restaurantes de comida rápida o restaurantes con pocos escrúpulos, saturan sus cuerpos a base de grasas…
Y por desgracia, muchas de esas personas no pueden evitarlo, porque no puedes trabajar desde las 9 de la mañana hasta las 19h sin pararse a comer.

La obesidad no es una adicción, es una enfermedad… una enfermedad que hasta hace poco no ha merecido la suficiente atención por parte de las autoridades sanitarias, que ahora se encuentran con una población con malos hábitos alimenticios y exceso de peso.

La obesidad es una enfermedad que nos ha llegado junto a un nuevo estilo de vida… trabajos con el famoso ‘horario comercial’ de 9 a 19h, con trabajos más sedentarios, con un ritmo de vida acelerado donde no tienes tiempo para irte al gimnasio a diario porque tienes que ocuparte de los niños, con el tener que comer fuera de casa a diario, o en comedores de empresa llevados por contratas que solo piensan en obtener el máximo beneficio a costa de una ínfima calidad de los alimentos y un abuso de los alimentos grasos…

Si realmente se quiere atajar el problema, ¿por qué no empezar por inspeccionar alimentos cargados de colesterol como los famosos Burgers? ¿o las pizzas echas de modo industrial que te llevan a casa? ¿o las contratas alimenticias que ofrecen menús sobresaturados de grasas?…

Y luego, seguir por acabar con las jornadas maratonianas en las empresas… para que la gente pueda tener más tiempo libre y pueda salir a pasear por las tardes, en lugar de encerrarse en casa cuando consiguen llegar a las 20-20.30h.

Pero parecer ser, una vez más, que es más fácil criminalizar a las víctimas, la parte más débil, y acusarles de ser los auténticos culpables de su enfermedad.

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Juan en octubre 16, 2006  · 

Prefiero la Tobin Tax.
http://en.wikipedia.org/wiki/Tobin_tax

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Martin Varsavsky en octubre 16, 2006  · 

Angelus,

En la película lo que dicen es que sí, que hay claramente casos de enfermedades que causan obesidad, pero que para la mayoría de los gordos y obesos se trata de un tema de adicción a la comida.

En mi caso, mi peso fluctua entre 77 y 81 y cuando subo de peso está relacionado con stress. Creo que somos muchos los que cuando estamos ansiosos comemos. Ese es el elemento adictivo de la comida, comer de más.

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salvatror en octubre 16, 2006  · 

Consume hasta morir

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Observador en octubre 17, 2006  · 

El gran problema es que las grasas de mala calidad. las responsables de la acumulación en el organismo, del colesterol y todas esas cosas son muchísimo más baratas que las de calidad, y si no vease el precio del aceite de oliva frente al de las margarinas «vegetales», procedentes de dudosas mezclas.
Así que por mucho que se apliquen impuestos a los productos de mala calidad, es dificil invertir su consumo por otros más sanos, y controlar su utilización lo veo muy difícil, pues no solo se trataria de vigilar todos los establecimientos de comida rápida, entrarian todos los restaurantes, bares, empresas de catering, cocinas de residencias, colegios,… lo veo dificil.

En cuanto a la obesidad, como todo hay que establecer matices, una cosa es sobrepeso y otra es obesidad, y es cierto que en algunos casos los obesos mórbidos lo son por un problema de metabolismo, podriamos considerarlo una enfermedad, que precisa tratamiento, pero no siempre es así en la mayoria de casos se trata de un problema matemático, se ingieren muchas más calorias de las que se consumen, y esa diferencia se acumula en el organismo.

Realmente la obesidad resulta perjudicial en todos los aspectos, para el cuerpo de la persona que la sufre, y para el sistema sanitario, por lo tanto no veo problema en considerarlo igual que el tabaquismo o el alcoholismo, si contra estos se toman medidas porque no se van a tomar para atajar también la obesidad.

Por ejemplo si una persona ocupa en un avión dos asientos, que pague dos billetes, no tiene que sufrir las consecuencias su compañero de asiento, o la Cía. aérea, que no puede vender el asiento contiguo.
Evidentemente al que sufre ese problema le va a parecer mal, pero a los fumadores también les parece mal la ley antitabaco, recordemos que hace algunos años lo de fumar era algo bien visto, elegante y glamouroso, en el aspecto de la obesidad también hay que ir cambiando el punto de vista.

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Antonio en octubre 18, 2006  · 

XL, por supuesto que no estoy a favor de los impuestos al tabaco… pero no porque no lo considere un problema grave, que yo mismo he sufrido muy de cerca, sino por lo que tiene de atentar contra la libertad individual.

El Estado no es quien para decirnos qué nos conviene, interesa o debe gustar.

Hoy en día, si decido fumar, tener una dieta basada en grasas saturadas, tomar el sol sin protección, ver películas americanas o escuchar la Cope, lo hago haciendo ejercicio de mi libertad y asumiendo las consecuencias que se pudieran derivar: cáncer, obesidad o conocer un único punto de vista. También soy libre de no fumar, comer una dieta equilibrada, tomar el sol con precaución y hacer zapping en la radio.

¿Por qué tiene el Estado que intervenir en estas decisiones, atentando contra mi propiedad privada, que es el fruto de mi trabajo?

Si como todos los días fuera de casa en un restaurante de menú, ¿quién no sabe hoy que una ensalada es más saludable que una fritura? ¿y quién me impide pedir ensalada y filete o pescado a la plancha?

A estas alturas, todos conocemos ya los peligros de fumar y comer grasas y es nuestra reponsabilidad como padres y personas el educar y cuidar de nuestros hijos y de nosotros mismos.

Esta responsabilidad no es delegable en nadie, y mucho menos en un Estado cuyos medios son la coacción vía los impuestos.

Y decir que las personas no saben utilizar su libertad con responsabilidad conduce a algo que se denomina totalitarismo. Ese es el camino de servidumbre.

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Pep en octubre 18, 2006  · 

En el comentario anterior, Antonio da en el clavo: educación nutricional desde la infancia!

pep

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Juan Navidad en octubre 18, 2006  · 

Interesante el tema 🙂

Existen muchos tópicos en los que no creo. Uno dice que si pagas por algo, lo valoras más. Eso les afecta a quienes pueden pagar, pero excluye a quienes no. Otro dice que si algo te afecta al bolsillo cambias de actitud. Yo tengo con 36 años un cuerpo atlético -herencia de cuando practicaba ese deporte- y muy buena salud, pero lo normal en mi caso sería tener más peso progresivamente por lo sedentario de mi trabajo -no tengo tiempo de hacer ningún deporte- y porque mi economía no me permite el lujo que supone para el bolsillo comer sano. Cuando vivía en Alicante, hasta enero del 2003, solía comprar mucha fruta y verdura en un mercado que ponían dos veces por semana junto a mi casa. Me gastaba siempre 2.000 pesetas o 12€ y me daba para hacerme unas comidas riquísimas. Si hoy tuviera que comprar los mismos productos, me costarían entre 25 y 30€. Mi problema no sé si sirve de ejemplo, pero no como demasiadas grasas ni chuletones ni similares, sino mucha comida basada en lo más barato: los hidratos de carbono. Puede que por ello mi economía no se resienta de la subida de impuestos que proponéis. Pero antes de darla ya «de facto» como solución, os podríais plantear algo tan simple como volver a hacer que la fruta y la verdura se puedan comprar como antes del euro. La salud y la balanza de muchas personas en España mejoraría o eso es al menos lo que pienso yo…

saludos,
Juan Navidad

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jeronimo zambrano en octubre 20, 2006  · 

El pez sale del agua y observa que cada vez más se busca explicar y solucionar el mundo desde la concepción de mercado.
Luego vuelve a su vida habitual y descubre que la mayoría de las causas que explican su accionar están relacionadas más con la educación que con sus ingresos y egresos.
Y allí sigue burbujeando tranquilo bajo el mar, bajo el maaaar…
Saludos

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maria en marzo 31, 2007  · 

hay mucha gente que sufre x esto pero , esto es una obsecion , que uno no sabe explicar , la mayoria de la gente a , sufre x esta causa , yo solo tengo 12 años , y estoy x cumplir los 13 , y x que tengo unos varios kilos de mas todos medicen que soy una gorda , pero yo tanpoco me puedo aguantarme mis opseciones , x esto quierodecir que si tienes menos de12 o mayor como 18 para adelante toda via tienes mucho tienpo para adelgasar, y ala gente a les digo quese cuiden mucho, y si queren seguir ha si que se han muy felisez y que nadien le venga ha decir que son guatones x que haci ban hacer ellos y mueran se muy felisez que no les de verguensa como son y sean muy felisez ….xaoooooooooooo.

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Martín Varsavsky en abril 1, 2007  · 

Tienes razón, María.

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