Taiwán

Hoy salgo para Taiwán. Volar a Taipei desde Madrid es un verdadero horror, ya que el periplo dura unas 20 horas con dos escalas. Pero voy a Taipei simplemente porque el futuro de FON está en Taipei. Es en Taipei donde se fabrican las Foneras y sin Foneras no tenemos FON.

Como no hemos aún llegado a un acuerdo con Linksys para que nos vendan sus routers a un precio que nos convenga desistir de fabricar nuestro router, necesitamos fabricarlos nosotros mismos. Y como el objetivo de FON es subsidiar la instalación del primer millón de puntos de acceso, la diferencia de comprar los routers a $50 o comprarlos a $25 es enorme. Además, las Foneras son más bonitas que los Linksys, menos aparatosas y tendrán dos SSID, es decir se emiten dos redes WiFi de cada Fonera, una para uso privado –llamada myplace– y otra para uso de los FONeros, llamada FON. Y no se trata solo de las Foneras, sino de los nuevos productos como el FON Liberator, que se está desarrollando en Cataluña, y del Skypefon, que están haciendo nuestros ingenieros de Alcobendas con los de Skype en Estonia.

Ahora uno podría decir para qué voy yo a Taipei. ¿No tenemos gente que puede ocuparse de esto? La verdad es que si tenemos gente: Diego, Iurgi, Jordi, José Antonio, todos están haciendo un gran trabajo con los equipos en Taiwá,n pero para FON es muy importante que AJ, el CEO de Accton y yo nos llevemos muy bien. Para Accton –que fabrica millones de routers– los primeros pedidos de decenas de miles de FON son un experimento.

Mi presencia en Taiwán ayuda a demostrar el enorme compromiso que tenemos en FON al fabricar las Foneras. Además, me voy a reunir con otros fabricantes, porque, aunque Accton esté haciendo un gran trabajo, tenemos que tener por lo menos otro proveedor.