En este video filmado ayer, comento sobre el fenómeno de cómo los inmigrantes chinos llegaron a Tavira, en Portugal, y triunfaron en el comercio con un modelo de integración vertical.

Lo que no filmé, pero quería agregar, es lo que vivimos hoy en San Lucar de Barrameda a nivel comercio. Comimos en un restaurante que se llama Virgen del Carmen, frente a la desembocadura del Rio Guadalquivir, y no pasaban más de 3 minutos sin que viniera otro africano a tratar de vendernos relojes y gafas falsas que llevaban en bandejas o directamente en la mano. Era muy incómodo.

Dos estrategias centradas en el comercio, una legal, una ilegal.