En Argentina Microsoft se pronuncia Maicrosoft. En España Microsoft. En España se lucha contra las palabras extranjeras como si estas fueran caballos de Troya que esconden a los enemigos del español. En Latinoamérica, y en casi todos los otros países, la situación es muy diferente. Se aceptan las palabras extranjeras con más facilidad y se las trata de pronunciar correctamente.

Aquí en España, si uno hace esto, directamente le miran mal. El orgullo parece consistir en pronunciarlas mal, a posta. Pero, dado que, por suerte, el resto del mundo es más abierto a las palabras extranjeras, nosotros decidimos que todos los que tengan FON serán foneros, donde sea que estén y hablen el idioma que hablen. Y está funcionando. El español tiene algo romántico para los extranjeros. «I want to be a fonero», venían los suecos y las suecas a decirme anoche en la gran fiesta de SIME. Yo, feliz.