Cuando me fui de USA en el ’95 para instalarme en Europa, las start ups europeas brillaban por su ausencia. Pero mucho ha cambiado desde entonces y eventos como TechTour en Suiza son prueba suficiente de que en Europa no sólo hay mucho talento, sino también capital y grandes ideas. Y estos 3 elementos en tiempo de crisis tienen aún mayores posibilidades de convertir una buena idea en una buena empresa.
Anoche di una charla durante la cena en el TechTour. Aprovecho para agradecerle la invitación al presidente del TechTour, Robert Lang, que fue el Manager de FON para Europa y ahora está en Result, empresa de mi amigo Ola Ahlvarsson, de la que también soy inversionista. Salimos con Nina de Madrid a las 4pm, llegamos a Lausanne a las 7pm, nos quedamos hasta las 10pm y luego volvimos a Madrid. Fue un viaje corto, pero en esas 3 horas tuve tiempo suficiente para dar mi charla y enterarme sobre algunos proyectos interesantes.
Mi discurso se centró en por qué la crisis es negativa para la mayoría de las personas, pero positiva para los emprendedores. En concreto, sobre como el sistema europeo de altas indemnizaciones y prestaciones sociales (en Europa es poco habitual dar stock options, pero son comunes las altas pagas por indemnizaciones) constituyen una buena fuente de ingresos que pueden permitir a un ejecutivo que se quedó sin trabajo convertirse en emprendedor. Muchos de estos ejecutivos ahora desempleados se encuentran con suficiente dinero como para dedicar, digamos un año de sus vidas, a una start up sin pedir compensación extra. Y en muchos casos un año es lo que hace falta para pasar de una idea a un plan con suficiente prueba de mercado como para conseguir financiación. Además en Europa, justamente por el tema de que los despidos no están basados en la gente que rinde menos sino en la que es más barata de despedir, el mercado laboral no es racional y se encuentra mucho más talento entre la gente sin empleo que en USA. Y es justamente esta gente despedida la que se necesita emplear en los nuevos emprendimientos.
Además, la crisis reduce la diferencia existente entre las grandes empresas y las start ups como proveedoras de empleo estable. Cuando las personas se dan cuenta de que el riesgo de perder sus empleos es similar en cualquier empresa, vieja o nueva, ser el dueño de tu destino al frente de tu propio emprendimiento o entrar en uno se convierte en algo más atractivo.
Luego de mi charla pude hablar con varios emprededores y VC’s que dan mucha vida al ecosistema de los emprendedores en Europa. Había muchos VC’s de pequeños fondos, de menos de 100 millones de euros, que son generalmente fundados por familias de mucho dinero. Lo que distingue a Europa de Estados Unidos es que los fondos institucionales se interesan menos en las start ups, pero, afortunadamente, familias de mucho dinero cuyas fortunas vienen de las start ups se convirtieron en inversionistas muy activos en este rubro.
Termino este post con Poken, una start up con base en Lausanne que merece una mención especial. Poken es un dispositivo pequeño que «estrecha la mano» («da la mano» para los lectores argentinos) a otros dispositivos o gadgets similares y cuando lo hace intercambian los datos de contacto de sus dueños. Los Pokens son geniales para las conferencias y eventos, ya que te ahorran mucho tiempo y no necesitas acordarte de llevar tus tarjetas de presentación.
Comparto a continuación algunas fotos del evento.