Llevamos una semana con el rompecabezas de cómo elegir a los líderes foneros españoles. Hemos repasado uno por uno los correos recibidos para decidir entre los que ofrecéis vuestro tiempo y vuestras neuronas para dar a conocer el movimiento FON, quiénes están mejor capacitados para ser los líderes de su ciudad, o barrio, y no es fácil.

En algunas provincias tenemos ya a foneros que serán los líderes Linus; en otras Bills; en algunas incluso de ambos. De muchas han llegado también mensajes aportando ideas para las cuestiones tecnológicas más complicadas. Estudiando el tema, hemos pensado que vamos a dividir el trabajo de líder en tres roles: Linus, Bills y Tekis. Los Linus y los Bills se encargarán de explicar a otros cómo funciona FON, organizar las kedadas, dar a conocer FON en su barrio, en su negocio, en su ciudad, en su libreta de correo y en su universidad… los tekis, además, echarán un cable para resolver las cuestiones técnicas más complejas.

Para explicar el sistema y lanzar una ciudad grande, hemos decidido elegir a los líderes de Madrid. Aquí ya tenemos un Linus entusiasta, Daniel Álvarez; un Bill que nos invitó a su bar, Manuel de Fookar Café, y un teki con más de 20 años de experiencia, Eduardo Sotorrio. Para el resto de provincias aún quedan roles vacantes, así que los que estéis interesados nos podéis escribir aún un email con vuestra ciudad y cómo os apetecería colaborar. Cuantas más ciudades, más seremos para crear el país Wifi. Pronto publicaremos algunos de los líderes de San Sebastián, Vigo, La Coruña, Santiago de Compostela, Barcelona, Zaragoza, Valencia, Bilbao y Sevilla. Eventualmente, no seremos nosotros los que elijamos los líderes foneros, sino que se postularán y habrá votaciones, algo similar a lo que existe en las comunidades de vecinos o los clubs.

Alguien me dijo que mientras muchos tratan de enseñar a los políticos a ser más emprendedores, FON es un emprendimiento que se inspira más en las estrategias de una ONG que de una empresa. El peligro -me dicen- es que las ONG no son tan ejecutivas como las empresas. Aunque soy consciente de esta crítica, sigo pensando que no es utópico pensar que FON va a lograr -mezclando una estrategia ONG/empresa/gobierno- lo que el gobierno y la empresa no lograron: entregar internet inalámbrico de alta velocidad para todos.

El 3G es un gran fiasco organizado por el gobierno y la gran empresa. Creo que la estrategia mixta de FON puede ocupar el espacio que el gobierno y la gran empresa dejaron vacío. Es más, coordinando el voluntariado en FON tenemos a Alberto Méndez. Alberto viene de la Xunta de Galicia, donde coordinó exitosamente el trabajo de cientos de miles de voluntarios que limpiaron las playas luego del trágico derrame del Prestige. Pero Alberto no está solo, sino que trabaja junto a Mayte Hidalgo, que viene de un ambiente muy diferente, el de coordinar las comunidades de MSN. Y ahí están Alberto y Mayte, trabajando codo a codo con todos los voluntarios foneros que quieren ver un país wifi.