Llevo una hora probando el Google Chromebook de Samsung.

Costando sólo 249 dólares no hay mucho de lo que quejarse. Es una pieza de hardware bastante decente por un precio súper barato. Si la competencia es, digamos, un MacBook Air de 1.000 dólares, cuyo hadware es muy parecido, el precio no tiene comparación. Pero ¿es un MacBook air? Ese es el problema. No lo es ni de lejos. El Chromebook es una solución para los que están enganchados a los productos de Google y sin un duro. De lo contrario es mucho mejor comprar un MacBook Air, un Windows OC, un Ubuntu PC, un tablet Android o un iPad mini.

Ahora si tú, como yo, ves los teclados de vidrio sólo como una solución temporal en tu vida, el precio a pagar por el poco peso de un iPad o un tablet Android pero una manera muy incómoda de escribir un post como éste, necesitarás un teclado de verdad. Y si necesitas un teclado de verdad hasta ahora tus opciones eran un PC, un Mac o un Linux (Ubuntu) en un PC. A partir de esta semana puedes añadir el Chromebook a la lista, especialmente si miras por el precio. Porque el Chromebook tiene un teclado de verdad, es sencillo, ligero y rápido, abre y cierra como el MacBook o incluso mejor. Pero mientras que el MacBook Air es una máquina que funciona de manera autónoma y también online, el Chromebook es prácticamente inútil cuando no está conectado al red. El Chromebook es todo lo que puedes hacer con el navegador de Chrome en un PC más un conjunto de funcionalidades muy limitadas que no requieren que estés online. El Chromebook es un dispositivo basado en la nube, donde la nube es Google.

Mirándolo desde el lado positivo, al ser un dispositivo en la nube, el Chromebook viene con un Google Drive de 100GB lo cual es como el Dropbox más grande que hayas visto nunca y tiene además un lector de tarjetas SD que te permite subir cualquier tipo de archivo a tu Google Drive, como fotos o videos. También cuenta con un procesador ARM, el tipo de procesador que utilizan tablets y móviles y que multiples empresas adquieren de ARM. Este procesador consume mucha menos energía y permite al Chromebook funcionar sin ventilador y estar frio, que es estupendo para los que están hartos de quemarse las piernas con los Macs.

En resumen, si ya eres fan de los productos de Google y estás mirando algo que no sea muy caro, adelante. Si no, cómprate un PC con Intel si te gusta Microsoft o un Mac, o instala Ubuntu en tu Windows. Todas estas opciones te darán muchas más funcionalidades que no están disponibles en el Chromebook como iTunes, programas de retoque fotográfico, programas de edición de video, etc.

Ahora la pregunta es: ¿por qué no se construye un Chromebook con Android? A mi me encantaría tener acceso al ecosistema de las apps de Android y poder teclear y también tocar la pantalla. Me gustaría ver el mismo hardware con Android. A lo mejor hay un hack para eso. Yo no lo he encontrado. Lo que sí encontré fue un hack para instalar Ubuntu en un Chromebook. Lo intentaré después.