portfolio_google_friendPiensa en las funcionalidades que hicieron del iPhone algo revolucionario cuando se lanzó. Haz una lista de todas ellas. Ahora piensa en todas las funcionalidades que trajo Android además de esas. Puede que necesite ayuda con mi lista porque además del código libre no se me ocurre ninguna otra. Las más importantes, como el teclado en la pantalla, la opción de hacer zoom con los dedos o el propio concepto de una “app” llegaron todas de la mano del iPhone. De hecho, es bastante probable que la mayor innovación de Android sea el haber conseguido hacer un iPhone a precio asequible.

Ahora hagamos otro ejercicio: ¿se te ocurre algún producto que pudiera nacer ahora y fuera tan diferente al iPhone como lo era la Blackberry o los Nokia en 2008? Lo único que me imagino es un ordenador con una interfaz basada solamente en voz hablada. Un ordenador al que le puedas hablar y que te responda. Ni pantalla ni nada. Un ordenador que sea como otra persona.

Cuando charlas con un amigo, no hay ninguna pantalla, sólo diálogo. Puede haber un cambio en el tono de la voz o algunas expresiones faciales mientras escuchas y ves a la otra persona pero si él o ella, por ejemplo, quiere describirte algo que nunca hayas visto, pongamos un animal, lo único de lo que dispone para que te lo imagines es su voz, es la elección que hace de las palabras. Así sería este ordenador.

Me pregunto si podríamos construir algo así. Sería como las Google Glass pero sin “glass”, sin gafas. Sólo voz que se emite y que se oye. Algo más barato y pequeño que un iPhone, sin pantalla y con una batería de menor tamaño. Un dispositivo que pudieras llevar puesto como si fuera una pulsera o un collar. Como un compañero virtual que pudieras llevar puesto. Y no te preocupes por poder parecer tonto hablando contigo mismo, la gente pensará que estás hablando por teléfono. ¡Ni siquiera te harían falta unas gafas de friki!

 

(Foto: Tom Chitty)

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